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Dos mujeres policías denuncian a un cabo de Torrejón por trato discriminatorio

Mujer, policía y lesbiana. Las tres palabras no encajaban juntas en la mente de Manuel Carballo, cabo del turno de noche de la Policía Local de Torrejón, según recoge en su denuncia una de las agentes subordinadas a él. "Grave discriminación, desprecio, trato vejatorio y falta de respeto por mi orientación sexual y por razón de sexo y condiciones", relata la denuncia, presentada contra el cabo en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de la ciudad. Tras más de un año de menosprecio y humillaciones públicas, la agente, que prefiere permanecer en el anonimato, empezó a dejar de dormir, a sufrir ansiedad y miedo. Hasta el punto de que tuvo que tomar una baja laboral el pasado noviembre. No podía más.

"Siempre ha tratado con desprecio a las mujeres", asegura Nuria San Román, otra agente del mismo turno, en referencia al mismo cabo. Ella también le ha denunciado, por "grave discriminación y menosprecio por razón de sexo y opinión sindical", según consta en su denuncia ante el Cuerpo Nacional de Policía. "Nos ponía a dos mujeres juntas a dar vueltas con el coche a no hacer nada o nos saturaba con atestados", explica esta policía. "A las mujeres nos ordenaba retirarnos si había una intervención. No nos dejaba actuar como a los agentes varones", relata. "Muchas mujeres policía han ido dejando el turno sin decir nada", explica San Román, "pero esto no podía seguir así". Las pocas veces que se dirigía a ellas, cuentan ambas agentes, era para soltar lindezas. "Con Franco estos rojos de Comisiones se cagaban", le decía a Nuria, según relata esta última.

"Esto lo solucionábamos rápido con la ley de vagos y maleantes de Franco", decía el cabo refiriéndose a la agente homosexual, según consta en la denuncia. Su grupo de afines le reía las gracias. Como cuando se refería a su propio hijo como un "cachorro de Nuevas Generaciones para dar caña a éstos [en referencia a los homosexuales]", según consta en la denuncia ante el juez. Empezó humillándola en público, hasta que en octubre la agente logró una reunión con un sargento y el cabo Carballo. "El cabo dijo que cambiaría su actitud, pero no fue así. Volvió a la carga. Me veía en un pasillo y me decía 'bollera'. Yo no podía más. Repercutía en mi salud y me dieron la baja", explica la mujer, ya recuperada. Ha pedido el cambio de turno.

Un portavoz del Ayuntamiento de Torrejón, en manos del PP, explicó que se trata de "denuncias entre particulares por la vía civil". "El Consistorio no tiene nada que decir hasta que se resuelvan". A mediados de enero, el Ayuntamiento destituyó al concejal de Seguridad, José Luis Navarro Coronado, y al delegado de Seguridad, Raimundo Domínguez. Según el portavoz, estos cambios son ajenos a las denuncias. El cabo Carballo declinó dar su versión a este diario.

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