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Dificultades en el mercado laboral

Zapatero no respaldará a quienes le pidan apoyo para recortes salariales

El congreso de CC OO arranca con las fuerzas de Fidalgo y Toxo igualadas

Manuel V. Gómez

La crisis arrecia y no hay síntomas de que vaya a amainar. En este escenario, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, advirtió ayer a quienes proponen recortes de salarios y derechos de los trabajadores que "no deben llamar a la puerta del Gobierno". Y, en consecuencia, se comprometió a no rebajar los derechos laborales durante la inauguración del congreso de Comisiones Obreras, en el que los delegados tendrán que elegir a su secretario general entre José María Fidalgo e Ignacio Fernández Toxo.

"El horizonte debe ser ampliarlos [los derechos laborales]", afirmó Zapatero. El escenario y el ambiente era el propicio; muy distinto del que se encontró la semana pasada en la asamblea anual de la patronal. El discurso de Zapatero también fue diferente. Lejos del tono exigente que empleó ante la cúpula empresarial, la intervención tuvo un acentuado carácter social. Reiteró promesas (aumentar las pensiones más bajas y el salario mínimo); rechazó nuevas bajadas de impuestos, cotizaciones sociales y recortes salariales; defendió las medidas anticrisis del Gobierno; y prometió ser "sensible" a la petición sindical de aumento de la protección a desempleados. También el final fue distinto. No hubo reproches espontáneos.

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La respuesta corrió a cargo del anfitrión, el secretario general de CC OO José María Fidalgo. El líder sindical reprochó a Zapatero que no hubiera cumplido en parte los acuerdos alcanzados en 2006 entre sindicatos, patronal y Ejecutivo que propiciaron la última reforma laboral. "El Gobierno incumplió lo previsto para reforzar la Inspección de Trabajo y los Servicios Públicos de Empleo", afirmó.

Fidalgo también fue crítico con la actuación del Gobierno en su respuesta a la crisis: Desde la resistencia de Zapatero a aceptar su existencia -"casi todo lo malo empieza por no querer mirar para los síntomas"- hasta la exposición de las medidas -"hubiéramos deseado más reflexión y menos compulsión. Más cocina y menos escaparate".

En su intervención, en la que daba cuenta de su gestión, el líder de CC OO reivindicó su tarea en los últimos cuatro años. En cambio, no hizo mención alguna a la disputa por el liderazgo de la formación que mantienen él mismo e Ignacio Fernández Toxo, que hasta ahora ha sido secretario de Acción Sindical.

Cuando falta un día para que se elija al secretario general, todo indica que los 1.001 delegados tendrán que optar entre dos candidatos y sendas listas para la Comisión Ejecutiva. Ambas partes se han cruzado propuestas de integración para formar una única candidatura. Pero ambas exigen la secretaría general, lo que ha evitado el acuerdo. Tanto los partidarios de Fidalgo como los de Toxo creen contar con una mayoría ajustada.

De izquierda a derecha, Mariano Rajoy, José María Fidalgo, José Luis Rodríguez Zapatero y Celestino Corbacho, en el congreso de CC OO.
De izquierda a derecha, Mariano Rajoy, José María Fidalgo, José Luis Rodríguez Zapatero y Celestino Corbacho, en el congreso de CC OO.C. ÁLVAREZ

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Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.

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