Ibarretxe insiste en que el progreso viene del autogobierno
Asegura que la crisis es "cultural" y está provocada por la "soberbia"
Ibarretxe sigue con su teoría de que la defensa de la identidad y el autogobierno es clave para gozar de más progreso. "Es falso ese planteamiento que dice que la defensa de la identidad, de la cultura y de la lengua ha pasado a segundo plano porque en primer plano está la defensa del progreso y el bienestar de la sociedad vasca", aseguró ayer en un acto en Plentzia.
En su intervención ante la asamblea general de EGI, las juventudes del PNV, el lehendakari volvió a referirse al derecho a decidir, aunque evitó hablar de consultas. "Decidir en Euskadi es progresar", afirmó. Su disertación, que luego continuó en forma de debate con los jóvenes peneuvistas pero sin la presencia de los medios de comunicación, giró en torno a la crisis económica, sobre lo que esbozó su particular visión.
Para Juan José Ibarretxe lo que existe es una crisis cultural "derivada fundamentalmente de la soberbia", por lo que los cambios que se deben producir son "esencialmente culturales". Se refirió a la "irresponsabilidad" de algunas entidades financieras que aseguraron grandes rentabilidades y que han causado ahora el colapso. "Después nos han pedido que pongamos nuestro dinero con el argumento poderoso de que, si no, nos vamos todos juntos al fondo del mar. Por eso, es una crisis de soberbia, una crisis de cultura".
El candidato del PNV para las elecciones autonómicas de marzo no pudo evitar referirse, aunque de manera muy sutil, a la posibilidad de un cambio de gobierno en Euskadi por vez primera en 29 años. "Estamos tranquilos", manifestó tras minimizar una posible derrota de su partido. "La convocatoria electoral no cambia las cosas. Los problemas seguirán ahí al día siguiente". Y recomendó a los partidos y a los medios de comunicación que "están pensando" sólo en las urnas que dediquen sus energías a otros asuntos. "Quien piensa en elecciones", dijo, "no piensa en soluciones".
Ibarretxe se dirigió a los jóvenes de su partido para indicarles que sus problemas son los mismos que los de la sociedad vasca en su conjunto y les lanzó su receta del "esfuerzo y el trabajo diario". Volviendo a la cuestión identitaria, les recordó que el pueblo vasco, "el más antiguo de Europa" seguirá existiendo "dentro de 2.000 años".
