_
_
_
_
_

Sin autocrítica

La consejera de Cultura del Gobierno vasco, Miren Azkarate, respondió con un lacónico "no tengo nada que comentar" a las preguntas sobre el dictamen de la comisión investigadora del caso Guggenheim. El director general del museo, Juan Ignacio Vidarte, prefirió hacer pública una carta en la que se exculpaba de responsabilidades en el desfalco y en las pérdidas por cambio de divisas. Vidarte atribuyó la culpa al ex director de Administración y Finanzas, Roberto Cearsolo, autor confeso del desfalco, por haber traicionado la confianza que depositó en él.

Economista de la Comercial de Deusto, Vidarte se situó al frente del Guggenheim cuando el proyecto daba sus primeros pasos a pesar de carecer de experiencia en el mundo del arte, manteniendo tan buenas relaciones con las instituciones vascas como con la Fundación Solomon R. Guggenheim. En plena agitación por los trabajos de la comisión parlamentaria de investigación, la fundación neoyorquina le nombró director general de Estrategia Global, puesto que compatibilizará con su cargo en Bilbao.

Más información
El Guggenheim se oxida (y mal)
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_