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ITALIA | El impacto de la crisis

Berlusconi prepara un tijeretazo al gasto público

En Italia, con la deuda pública más alta de Europa y el crecimiento encasquillado en los últimos años, el nuevo Gobieno de Silvio Berlusconi, con apenas tres meses de vida, centra el foco económico en el recorte del gasto público y los impuestos. La crisis internacional amenaza con dar el golpe de gracia: la caída de la producción industrial, la ralentización de las exportaciones y el parón del consumo llevan al Banco de Italia a augurar un estancamiento casi absoluto hasta 2010.

Y eso que el sistema financiero italiano ha salvado bien la crisis de las hipotecas basura. "No hay un impacto directo en Italia por dos razones esencialmente", explica el economista Luigi Guiso, profesor de la Universidad Bocconi de Milán. "Por un lado la exposición directa de Italia hacia los mercados subprime es pequeña. Por otro lado, las familias italianas están generalmente poco endeudadas. Sólo un 30% de las familias tiene hipotecas". El incremento de los tipos de interés y del riesgo de insolvencia tiene un efecto menor en la economía italiana. "Las familias tienen todavía un alto nivel de ahorro", recalcó este jueves la presidenta de la patronal, Emma Marcegaglia, quien advirtió que el deterioro económico puede ser aún mayor en el tramo final del año.

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Berlusconi se apoya en el enorme volumen de la deuda pública italiana para rescatar su receta clásica: menos gasto público y menos impuestos. "No hay otro camino que reducir los gastos", advirtió este jueves el presidente italiano poco antes de que su ministro de Economía, Giulio Tremonti, avanzara en la Cámara de Diputados las líneas básicas del próximo plan económico trienal. "Estamos más allá del umbral de la crisis", reconoció Tremonti.

La eliminación del impuesto de bienes inmuebles, de las tasas sobre las horas extraordinarias y de las pagas de productividad son otras de las promesas económicas del Gobierno de Berlusconi. El Ejecutivo italiano también coquetea con la idea de imponer a las petroleras una tasa cuando el barril de crudo supere un determinado nivel de precios.

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