Canciones del noroeste

El pequeño sello Hush Records, radicado en Portland (Oregon), es tierra abonada para el brote de jóvenes talentos musicales. Un fértil vivero del que en los últimos tiempos han salido algunas de las mejores bandas del panorama independiente americano, como The Decemberists, quienes hace un par de temporadas abandonaron el nido para dar el salto a una multinacional. Una de sus últimas apuestas de futuro es la cantautora folk Laura Gibson, un nombre más que sumar a la última pléyade de mujeres que ahondan en las hondas ramificaciones de algunos de los géneros con más pedigrí de la música norteamericana. Aunque la austeridad de su recomendable segundo y último trabajo, If you come to greet me, la sitúe más cerca de los tonos sepia de Marissa Nadler que del colorismo insuflado en las últimas temporadas por Laura Veirs o Joanna Newsom. Para grabarlo contó con la colaboración instrumental de la banda Norfolk & Western, quienes se encargaron de arropar con cuerdas, vientos y teclados unas canciones que discurren parsimoniosas e intimistas, reducidas casi a los huesos, y que constituyen otra de esas apuestas ideales para degustar en la distancia corta. Al James, el líder de sus paisanos Dolorean, se encargará de oficiar como telonero.