20 grandes grupos compiten en el concurso eólico
San José propone un centro de I+D y Siemens, una fábrica de componentes
Una veintena de grandes grupos empresariales componen el grueso de los candidatos que concurren al concurso eólico convocado por la Consellería de Industria. Los 2.325 megavatios a adjudicar -Galicia contará con 6.500 en 2012- exigen inversiones directas de 3.500 millones de euros sólo para desarrollar sus planes eólicos. A ellos se suman los proyectos industriales que lleva cada propuesta, uno de los aspectos que más se valora desde Industria y que en su conjunto podrían multiplicar por tres la inversión.
"No aspiro a que todos sean felices, sino a que el descontento sea controlado"
El conselleiro de Industria, Fernando Blanco, aseguró ayer que todavía se siguen recibiendo plicas que se envían por correo y a través de los ayuntamientos. El conselleiro de Industria confía en tener el lunes o el martes próximo el número total de empresas que se han presentado, los parques a desarrollar y los megavatios a los que opta cada uno de los candidatos. Adelantar el plazo de resolución del concurso tres o cuatro meses es otro de sus objetivos, ya que en la propia consellería se ha creado una comisión específica para realizar las cribas.
No es previsible, a su juicio, que la adjudicación se concentre entre dos o tres grandes proyectos, debido a la gran cantidad de solicitudes presentadas, que calificó de "masiva". Para ilustrar la política que aplicará su departamento, Blanco señaló: "No aspiro a que todos sean felices sino a que, en todo caso, el descontento sea controlado". La estrategia de la Xunta es que "la sociedad perciba, por fin, que con la explotación energética en Galicia hay elementos que repercuten en el beneficio de todos los ciudadanos", añadió.
Si finalmente son 40.000 los megavatios solicitados por las empresas que se presentan, un techo que podría verse superado, significaría que la demanda es 20 veces superior. A la Consellería de Industria le toca ahora valorar los planes industriales y las medidas socioeconómicas incluidas en las propuestas, dos de los aspectos que más puntúan. Entre ellas se encuentran proyectos como el de Siemens. Como socio tecnológico, opta en una oferta a un total de 600 megavatios. La inversión adicional de la multinacional alemana pasa por destinar 30 millones de euros para instalar en Galicia una planta de componentes tecnológicos. Otro grupo de capital germano pero afincado en Portugal, Enercon, concursa por 300 megavatios y plantea una inversión de diez millones de euros para centralizar en Galicia parte de su producción destinada al mercado ibérico.
Entre otras apuestas, una de las que más expectativas ha generado es la del Grupo San José, que acaba de crear una división energética. La compañía que preside Jacinto Rey aspira a 733 megavatios de potencia para crear 26 parques eólicos, con el compromiso de adquirir al menos el 75% de los componentes a empresas gallegas. Las inversiones aparejadas a su propuesta ascienden a 1.000 millones de euros, de los que 110 millones corresponden a compromisos socioeconómicos, según fuentes del grupo. La creación de un centro de I+D, con sede en Santiago, en el que participe la propia Administración gallega y las universidades, es otro de los planteamientos incorporados a su plica. También prevé crear un centro de operaciones en red para los sistemas de interconexión entre parques eólicos.
Con la gestión de los recursos madereros y de biomasa como horizonte, Finsa se ha aliado con Gas Natural para conformar otro gran grupo. De la idea de la urgencia de las alianzas da buena muestra la estrategia de la compañía gasista, que pactó con el Banco Pastor y con la maderera acudir en dos ofertas, pero a última hora del martes presentó una propuesta en solitario.
Al grupo Andavia Renovables (Tojeiro, Coren y Copasa), que aspira a 800 megavatios, se le relaciona con proyectos agroalimentarios. Y Gamesa, que firmó la semana pasada un pacto con Iberdrola para inversiones eólicas y acude al concurso con Caixa Galicia, tiene previsto potenciar sus plantas gallegas de componentes eólicos, repartidas por Sigüeiro (ensamblaje), As Somozas (palas) y Abegondo (multiplicadores), en las que da empleo a 471 trabajadores.
