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"Hace mucho que no jugamos juntos"

Torres resta importancia a la imagen de la selección y Luis reconoce que faltó ritmo

Hasta el gol de Xavi el amistoso con Estados Unidos tuvo un efecto inesperado. Decepcionados por el mal juego de la selección española, los 22.500 aficionados presentes en las gradas de El Sardinero pitaron con énfasis a la roja. El punto culminante llegó nada más empezar la segunda parte, cuando Johnson, libre de marca, cruzó fuera un centro de Lewis desde la izquierda. Los remates de Xavi al larguero, y de Senna a un palo, calmaron los ánimos tan sólo unos minutos.

"Ellos presionaron mucho en la primera parte. Hay que tener paciencia. Luego bajaron el ritmo en la segunda parte, jugamos con más fluidez y mejoramos", expuso Xavi. "Ha costado, pero las sensaciones son inmejorables", prosiguió el cerebro del Barça, que marcó tras una pared con Güiza y romperle la cintura a tres rivales.

Menos sonriente se mostró Luis. "En la primera parte no tuvimos ritmo y así es complicado", reconoció el seleccionador. "Jugamos con algunos jugadores mermados como Silva y Torres y no teníamos a Villa... No había profundidad. Estamos buscando quien puede jugar mejor delante de la línea", abundó Luis, que superó las 32 victorias de Miguel Muñoz. Con un matiz: el actual seleccionador lo consiguió tras disputar 48 encuentros. Muñoz, que clasificó a España para la final de la Eurocopa de 1984, lo hizo en 63 partidos. Si fuera por el valor de sus jugadores, España sería la próxima campeona de Europa. Luis dispone de un equipo que en el mercado costaría 251 millones de euros, 18 más que Italia.

Fernando Torres restó importancia a la imagen del equipo. "Hace mucho tiempo que no jugamos juntos y estos partidos nos sirven para volver a entendernos, coger ritmo y ganar confianza. Todos tenemos la cabeza en Rusia", dijo el punta del Liverpool. Pese a la traca final, la selección alimentó las dudas que originó su encuentro del fin de semana contra Perú. Anoche casi se quedó sin marcar, lo que no ocurría desde el pasado 17 de octubre, cuando empató en Finlandia. Faltaron diez minutos para que el resultado se repitiera ante Estados Unidos. El cuadro de Bob Bradley, que venía de perder en Wembley por 2-0 contra Inglaterra ocupa la 21º posición en el ranking de la FIFA. Justo por delante de Suecia (23º), a la que venció por 2-0 hace unos meses, y Rusia (25º), rivales de la roja en el Grupo D en la cita de Austria y Suiza. La otra rival del grupo, Grecia, es la campeona vigente del torneo.

La fiesta la redondeó Fernando Navarro, que debutó minutos antes del gol de España. Palop es el único integrante de la plantilla que sigue sin hacerlo.

El seleccionador introdujo dos novedades respecto a los titulares contra Perú. Cazorla y Cesc entraron por Iniesta y Villa. El centrocampista del Barça causó baja por una gastroenteritis, mientras que el delantero del Valencia no se recuperó de un golpe que recibió en el muslo derecho durante un partidillo el día anterior. A Bradley no le sirvió de excusa: "España debe meditar por qué no nos creó ocasiones", remachó el técnico de EE UU.

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