Heredia propone al PSOE malagueño un cambio "necesario y responsable"

Miguel Ángel Heredia, el diputado que aspira a suceder a Marisa Bustinduy al frente del PSOE de Málaga, emprendió ayer su campaña interna con un delicado ejercicio de equilibrio entre autocrítica y reconocimiento a la actual ejecutiva; y dijo mirar a la organización con "una mezcla de orgullo y exigencia".

Arropado por el aparato y el sector oficialista del partido, pero consciente de que hay un clamor interno por un cambio de rumbo, Heredia convocó a los socialistas malagueños a "un cambio necesario y responsable" y proclamó que su proyecto "tiene un sólo objetivo: unir".

El candidato oficialista equilibra autocrítica y reconocimiento

Más de dos centenares de militantes socialistas respondieron a la invitación de Heredia, que inició su discurso con un guiño al reivindicar la validez del "no estamos tan mal" con el que José Luis Rodríguez Zapatero afrontó el congreso federal en el que fue elegido secretario general, pocos meses después de que el PP ganara las elecciones generales por mayoría absoluta.

Aseguró que el PSOE tiene unas "magníficas bases para avanzar en la provincia" y que los socialistas malagueños tienen "el crédito de los compromisos cumplidos", pero también advirtió de que "si no creyese que hay cosas que mejorar en nuestro partido, si pensase que todo está perfecto, no presentaría mi candidatura".

El aspirante a secretario general dijo encarar el reto con sentimientos entremezclados. Orgullo "porque en estos años hemos transformado esta tierra", al haber hecho que Málaga pase del puesto 32 al 3 entre las provincias con más inversión del Estado.

Y exigencia porque es "necesario" reconocer que toda esta gestión "no ha ido acompañados de logros electorales", especialmente en los ámbitos urbanos y en la costa. Prometió profundizar en las causas de este fenómeno, que no es privativo de Málaga y es común al Mediterráneo, anunció un nuevo comité de expertos para analizarlo y dijo que su objetivo es un partido "sin miedo a cambiar aquello que no funcione". Entre sus retos, fíjó como "principal" gana la alcaldía de Málaga.

El discurso estuvo plagado de apelaciones a la unidad interna. "Además de voluntad, tengo el mejor instrumento de integración que conozco: trabajo", dijo.

Además de Bustinduy y el presidente de la Diputación, Salvador Pendón, asistieron la consejera de Cultura, Rosa Torres, diputados y cargos públicos, y alcaldes como los de Benalmádena, Estepona y Álora, entre otros.

En el pulso entre socialistas malagueños, hoy será turno de Alternativa Socialista, que presentará la candidatura a la secretaría general de Fernando Arcas, ex delegado de la Consejería de Cultura que ya estuvo en la ejecutiva.