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El legado de Andrés Segovia enfrenta a sus herederos con la Fundación

Ginés Donaire

El vigésimo aniversario de la muerte de Andrés Segovia se ha visto enturbiado por la pugna que mantienen los herederos del intérprete de guitarra clásica con la Fundación Andrés Segovia a cuenta del legado del artista. Los primeros pretenden sacar parte de los enseres del músico fuera de Linares (Jaén) por entender que no se han cumplido los fines por los que se creó la Casa Museo Andrés Segovia. A esta pretensión se oponen los patronos de la Fundación, cuya vicepresidencia ocupa el Ayuntamiento de Linares. Las dos partes se vieron ayer las caras en una vista preliminar en el Juzgado de Linares, que ha fijado para el 17 de enero la vista definitiva al no ser posible la conciliación. El magistrado ha valorado en 120.000 euros el valor del legado de Segovia.

Andrés Segovia nació en Linares en 1893 y murió en Madrid en 1987. Desde hace siete años, Linares le rinde tributo con la Casa-Museo de Andrés Segovia, en el restaurado Palacio de los Orozco, a donde fueron trasladados en 2001 sus restos mortales. El museo acoge enseres personales, partituras y un fondo documental del músico linarense que, desde su debú en Granada en 1909, mantuvo una estrecha amistad con Falla, García Lorca y Fernando de los Ríos.

El biógrafo de Andrés Segovia y miembro de la Fundación, Alberto López Poveda, destacó ayer que la última voluntad del guitarrista era que todo su legado musical se exhibiera en su pueblo natal. Tampoco desde el Ayuntamiento se entiende la postura de la viuda del artista, Emilia del Corral, y de sus hijos, pues se destaca el buen estado de conservación de la Casa Museo del músico.

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