Los niños afirman que saben esquivar los contenidos peligrosos de Internet
"Se lo diría a cualquiera antes que a mis padres. Me da miedo que mi madre vea sus temores confirmados y me prohíba utilizar el chat". La confesión de esta niña alemana no es una excepción. Los datos del Eurobarómetro que presentó ayer la Comisión Europea revelan que los chavales de 9 a 14 años huyen del consejo de sus padres como de la peste cuando se topan con contenidos violentos en Internet o con adultos infiltrados en los chats de jóvenes. Prefieren contárselo a sus amigos o a sus hermanos.
La encuesta, que pregunta por primera vez a niños de toda Europa cómo se relacionan con Internet y con el móvil, indica que los jóvenes se mueven como pez en el agua en la Red y se muestran muy seguros frente a las nuevas tecnologías. El estudio concluye que, en general, los jóvenes conocen los riesgos que entraña el uso de Internet o del móvil.
Los chavales no sólo dicen que son conscientes del peligro de toparse con pedófilos en los chats, sino que además aseguran saber cómo enfrentarse a ellos. "Los padres se creen que somos estúpidos, pero nosotros escuchamos a nuestros amigos y aprendemos a ser cuidadosos", explicó una niña sueca del grupo de 12 a 14 años a los encuestadores.
La mayoría de los preguntados dice que lo importante es no dar nunca a los extraños el teléfono y la dirección, que hay que salirse del chat ante la presencia de un individuo sospechoso y que, por ejemplo, es muy útil pedirle al "nuevo amigo" que muestre su rostro ante la webcam para hacerse una idea de su edad.
Escapar del peligro
A pesar de su dominio tecnológico y de cómo deben comportarse frente al ordenador, no todos los menores consiguen escapar de los peligros, a juzgar por los encuentros que alguno confiesa haber tenido a través de la Red. "Me encontré con él en una estación. Era un hombre horrible, viejo, de 44 años. Me fui. Nunca se lo he contado a mis padres, porque se enfadarían y me podrían quitar el teléfono móvil", relata un chaval danés.
Otra, francesa, del grupo de encuestados de entre 9 y 10 años, cuenta que acompañó a su amiga a una cita con un chico que había conocido por Internet, ambas pertrechadas con un aerosol antivioladores. "Tuvimos que utilizarlo porque era un hombre de 50 años que molestó a mi amiga". Y una tercera, de Chipre, dice que su prima chateaba con un chico por Internet que creía que tenía ocho años, pero resultó ser un adulto. "Un día fue a su casa y mi prima estaba sola, así que no le abrió la puerta".
El Eurobarómetro revela que la mayoría de los niños europeos utiliza Internet varias veces al día y que además tiene un teléfono móvil (nueve de cada 10 menores de 12 a 14 años). Los padres controlan más el uso del ordenador que el del móvil.
