Iglesia contra Amnistía
No recuerdo que hubiera llegado nunca tan lejos. Amnistía Internacional, organización de trayectoria intachable en la defensa de los derechos humanos, es hoy objeto de ataques por parte de la Iglesia católica. Como excusa, el manido tema del aborto, que los dirigentes eclesiales suelen sacar cuando quieren descalificar. Pero, ¿no habrá influido en esta nueva campaña vaticana la reciente visita del presidente norteamericano Bush? Por todos son conocidas las críticas que Amnistía Internacional dedica al Gobierno estadounidense por su guerra sucia contra el terrorismo (Guantánamo, detenciones secretas...). Tras la liquidación del Concilio Vaticano II, los sucesivos papas se han alineado con las posturas políticas más conservadoras, en una suerte de integrismo occidental donde el aborto se ha convertido en el único pecado perseguible. ¿Qué pensará el santo padre sobre la pena de muerte en EE UU o los condenados a morir por hambre en África? A juzgar por la poca vehemencia que manifiesta contra estas realidades, parece que lo que más le molesta es la defensa que de los derechos humanos realizan organizaciones tan admirables como Amnistía Internacional.