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Segura propone que el mandato del presidente de la CNMV sea más largo y no se renueve

El nuevo responsable del organismo reconoce que David Taguas le habló de Gas Natural

Julio Segura propuso ayer, tras superar la prueba sobre conflictos de intereses que le permite ser nombrado presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que el mandato en este cargo sea superior a cuatro años y que no sea renovable. Segura, con los votos a favor del PSOE, la oposición del PP y la abstención del resto de grupos, desmontó con su intervención, valiente y clarificadora, la teoría sobre la falta de independencia que expuso Manuel Conthe, aunque desveló que recibió una llamada del jefe de la Oficina Económica, David Taguas, para hablar de Gas Natural.

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Julio Segura, consciente de que debe sacar a la CNMV de un marasmo, aprovechó su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso para proponer una reforma profunda del organismo. Puso el énfasis y el entusiasmo de un profesor implicado y, sin necesidad de llenar su discurso de citas a clásicos, captó la atención de unos diputados que habían estado muy dispersos. Segura propone ampliar los cuatro años del periodo de permanencia en el cargo del presidente y que no pueda prorrogarse, lo que "incentiva llevarse bien con el poder" para continuar.

Además, a su juicio, los consejeros debieran ser renovados por tercios y comparecer previamente en el Congreso y el vicepresidente, nombrado a propuesta del presidente, fórmula que habría evitado más de un disgusto, pero no desaparecer, como propuso Conthe. Segura, que cree que la CNMV es "manifiestamente mejorable", subrayó luego que el plantel es excelente.

El mandato de Segura será por 17 meses, hasta octubre de 2008, y puede prorrogarse cuatro años, aunque no se plantea si seguirá. "Mi horizonte es un contrato temporal", reflejó. "Lo que menos me preocupa a mi edad [64 años] es si me van a ofrecer seguir", indicó. De momento, ilusión no parece faltarle. Eso sí, pidió a los diputados que le dejen 100 días de gracia y luego le convoquen para evaluarle.

Son sus deberes. Antes de meterse en harina, explicó y contestó con tono sosegado a las preguntas que recibió, sobre todo de la derecha. Hizo un repaso exhaustivo de las actuaciones de la CNMV sobre la batalla de Endesa y razonó el sentido de sus votaciones que, hasta la última y trascendental, fueron a favor de los intereses de E.ON. Desveló que propuso que no se obligase al grupo alemán a presentar su oferta en sobre cerrado, por lo que habría podido mejorarla cuantas veces hubiera querido y "se habrían evitado muchos problemas". Sin embargo, el curso fue otro y Conthe tuvo que dimitir al fracasar en el intento de abrir expediente a Enel y Acciona, que según Segura tuvieron una actuación correcta y "no punible".

Reconoció que había lugar a "una reflexión más pausada" ante el vacío legal. Algunos grupos pidieron que se publiquen las actas. Segura fue tajante: "Las deliberaciones de la institución son secretas por imperativo legal".

Las explicaciones le dieron pie para desmontar la teoría de la falta de independencia. "Pude ser errático o aleatorio, pero no en ningún caso dependiente", subrayó. Después negó haber recibido "presiones" del Gobierno durante los 13 meses que lleva de consejero y se detuvo en los esporádicos contactos mantenidos con Pedro Solbes, Miguel Sebastián y David Taguas. Declaró haber visto al vicepresidente una vez entre 2004 y 2005 para decirle que quería dejar el Banco de España y otra el pasado 2 de abril. En cuanto al anterior jefe de la Oficina Económica, señaló que coincidió "en una cena en casa de amigos", y que el actual, Taguas, hace tres meses le manifestó su opinión sobre las alegaciones de Gas Natural. "La mía era distinta a la que me manifestó y voté con arreglo a mi opinión". Tras ese contacto, tuvo otra llamada el 23 de marzo, cuando se decidió aplazar la OPA, que no pudo contestar.

Segura también defendió la independencia del vicepresidente de la CNMV, Carlos Arenillas, cuya dimisión pidió Conthe. Segura indicó que "su comportamiento ha sido técnicamente impecable". Luego, se extendió sobre el concepto de independencia, que a su juicio es "tener criterios propios, decidir de forma autónoma y, naturalmente, no recibir instrucciones". "Si para ser independiente", añadió, "no se puede tener familiares, amigos o conocidos ni en la profesión ni en la administración pública; no se debe escuchar la opinión de nadie y, al mismo tiempo, se debe ser independiente y con dilatada experiencia, el conjunto es vacío, y yo no pertenezco a él", concluyó.

Al término, el diputado Martínez Pujalte, del PP, le preguntó quién le gestiona su patrimonio. Segura, quien dijo que su declaración se puede consultar en el registro de altos cargos, contestó que tiene un fondo ciego en Intermoney desde 1990. "Le hemos pillado", prorrumpieron varios diputados de la derecha, que creyeron ver un filón porque en dicha empresa trabajaron Sebastián, Taguas y Arenillas.

Más tarde, el PP anunció que concentrará toda la sesión de control del miércoles en el Congreso en el asunto de la crisis de la CNMV, informa Carlos E. Cué. El PP pedirá la reprobación de Solbes, que estará ausente por hallarse de viaje oficial en Argelia, según estaba previsto desde mediados del mes pasado y anunciado este lunes al Congreso. Además, la pregunta de Mariano Rajoy a José Luis Rodríguez Zapatero versará sobre este asunto,

Julio Segura, en la Comisión de Economía del Congreso.
Julio Segura, en la Comisión de Economía del Congreso.GORKA LEJARCEGI

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Sobre la firma

Miguel Ángel Noceda
Corresponsal económico de EL PAÍS, en el que cumple ya 32 años y fue redactor-jefe de Economía durante 13. Es autor de los libros Radiografía del Empresariado Español y La Economía de la Democracia, este junto a los exministros Solchaga, Solbes y De Guindos. Recibió el premio de Periodismo Económico de la Asociación de Periodistas Europeos.

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