_
_
_
_
_

El Congreso propone que se den incentivos para que los hombres concilien la vida laboral y familiar

Carmen Morán Breña

La discriminación positiva podría animar a los hombres a que soliciten los permisos que la ley concede para conciliar la vida personal, familiar y laboral. Hasta ahora son las mujeres quienes mayoritariamente piden estas licencias. Las comparecencias de numerosos expertos en conciliación e igualdad que pasaron por el Congreso el año pasado han puesto de manifiesto que las mujeres siguen copando estos permisos para encargarse de la casa, los hijos, las personas con discapacidad o los mayores, mientras que los hombres prosiguen su carrera laboral.

A la vista de estas exposiciones, la comisión de Trabajo y Asuntos Sociales aprobó ayer en el Congreso una serie de propuestas para que hombres y mujeres puedan conciliar el trabajo con el resto de la vida. Entre ellas, se pide que los padres tengan permiso de paternidad como derecho individual e intransferible (independiente del de maternidad, como prevé la Ley de Igualdad) y con una duración suficiente para que puedan compartir la crianza. Y se solicita al Gobierno, a las empresas y los agentes sociales que fomenten el empleo de la mujer en condiciones de calidad equiparables al masculino, así como su representación en los ámbitos de decisión.

El informe también recoge medidas para flexibilizar los horarios laborales y poder llevar la oficina a casa mediante el teletrabajo. En España se echan muchas horas en el tajo y, sin embargo, la productividad no es ejemplar, dice el informe. Hay que acabar con la cultura del presentismo, o sea, estar presente en el trabajo sin que eso se traduzca en rendimiento. La inspección de trabajo se encargaría de vigilar que los empleados no dediquen más horas de la jornada legislada.

También solicitan que los horarios escolares, comerciales, televisivos, de reuniones en la empresa, faciliten la conciliación con la vida laboral. Y que los servicios públicos, desde autobuses a escuelas infantiles, satisfagan la necesidad de ahorrar tiempo y conciliar horarios. Los ayuntamientos deben tener competencias para hacer planes de conciliación locales, prosigue el informe.

Por otra parte, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, presentó el balance de un año del Plan Concilia entre los funcionarios estatales. 10.000 empleados públicos han solicitado algún permiso de los previstos, por lo general jornadas flexibles para atender a los hijos (4.730 solicitudes), pero cabe destacar el dato de permisos de paternidad, 2.163, prácticamente el 100% de los empleados que tuvieron hijos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carmen Morán Breña
Trabaja en EL PAÍS desde 1997 donde ha sido jefa de sección en Sociedad, Nacional y Cultura. Ha tratado a fondo temas de educación, asuntos sociales e igualdad. Ahora se desempeña como reportera en México.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_