Siete menores, sospechosos de los destrozos en la tumba de Ordóñez
La Ertzaintza (policía vasca) identificó ayer a siete menores por su presunta implicación en los destrozos causados en la tumba de Gregorio Ordóñez, dirigente popular asesinado por ETA en 1995, que quedó cubierta de flores el viernes pasado, tras un homenaje al que asistió el ex presidente del Gobierno José María Aznar. Los agentes constataron que al menos las flores que estaban sobre el sepulcro habían sido pisoteadas y destrozadas, y condujeron a comisaría a algunos jóvenes que no portaban documentación.
Por otra parte, en la madrugada de ayer se produjeron dos ataques de violencia callejera. Dos encapuchados intentaron prender fuego a una oficina de Telefónica en Amorebieta (Vizcaya). En Sangüesa (Navarra), varias personas hicieron estallar un petardo en un cajero del BSCH.