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Diez claves para entender a John Coltrane

Iker Seisdedos

Arranca el año del 40º aniversario de la muerte de John Coltrane con el legado de su música intacto donde el saxofonista lo dejó; en lo alto de una de las cumbres creativas de la música de siglo XX y cuya influencia trasciende al jazz.

- El origen. Ni la familia de clase media de Carolina del Norte en la que nació en 1926; ni el padre, sastre aficionado al ukelele; ni la juventud en Filadelfia tocando tosco rhythm and blues. Nada presagia en sus comienzos el genio que se fraguaba.

- Nueva York, 1955. El ingreso en la banda de Miles Davis lo cambió todo; pasó de ser uno de tantos musculosos tenores de hard bop (mezcla de blues y noche en la ciudad) a la inmortalidad junto al trompetista. De su asociación surgieron joyas como Kind of blue (canon de jazz clásico).

- La 'luz'. Coltrane (Trane para los enterados) descubrió en 1957 su propia espiritualidad, una mezcla de catolicismo, panteísmo oriental y conciencia negra. Ésta (y en plan más pedestre, su mujer de entonces, Naima) le ayudaron a superar la adicción a la heroína. Como tras un pacto con el diablo, su música, que partía del jazz modal, estilo que alguien describió "compuesto por retazos de sonido", tomó insólitos bríos.

- Saxo soprano. Hasta entonces, instrumento inusual y algo chillón, Coltrane lo redimió en My Favorite Things (1960), vals simplón de Sonrisas y lágrimas que convirtió en la canción más bella que quepa imaginar. Esta época, definida también por su composición Giant Steps (o la progresión de acordes más endiablada del jazz) ha inspirado a generaciones de músicos y hasta un

memorable chiste de Woody Allen, en su filme Alice.

- El cuarteto. Entre las bandas que lideró, brilla la magia del grupo de principios de los sesenta junto a McCoy Tyner (piano), Elvin Jones (batería) y Jimmy Garrison (bajo). Pocos entendieron cuando Trane los cambió por los jóvenes músicos su última formación: Pharoah Sanders, Rashied Ali o Alice Coltrane, pianista, esposa y madre de Ravi, saxofonista como su padre.

- 'A Love Supreme'. Su obra cumbre. Concebido como una oración, fue saludado como un clásico del jazz el mismo día de 1964 en que se publicó. De gran valía psicotrópica, los hippies lo abrazaron con fervor.

- Ascenso. En los últimos años se contagió de la exploración que fue bandera del free jazz. Su disco Ascension, suite libre improvisada de 40 minutos, es clave en el género.

- El adiós. Un cáncer de hígado no diagnosticado fue la causa de su muerte el 17 de julio de 1967. Tenía 40 años. A su funeral acudieron unas mil personas entre músicos, beatnicks iluminados y huérfanos fans.

- El culto. En un pequeño local de San Francisco tiene sede la Saint John Coltrane African Orthodox Church, curiosa congregación que se reúne en domingo para rezar al músico como un profeta y oír A love supreme interpretada por un octeto.

- La historia sigue. Su obra, rentable para las compañías, se repone regularmente en las tiendas. Cabe destacar, con todo, tres cajas recién editadas en Universal (The fearless leader, The Miles Davis Quintet Sessions y The house that Trane built). Un buen lugar para empezar a tirar del hilo.

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Sobre la firma

Iker Seisdedos
Es corresponsal de EL PAÍS en Washington. Licenciado en Derecho Económico por la Universidad de Deusto y máster de Periodismo UAM / EL PAÍS, trabaja en el diario desde 2004, casi siempre vinculado al área cultural. Tras su paso por las secciones El Viajero, Tentaciones y El País Semanal, ha sido redactor jefe de Domingo, Ideas, Cultura y Babelia.

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