_
_
_
_
_

Un colectivo ciudadano lleva a los juzgados la ampliación del puerto de Mutriku

La querella se basa en la falta de declaración de impacto ambiental de todas las obras

La plataforma ciudadana de Mutriku, Hobetu Leike, presentará en los próximos días una querella contra las obras de ampliación del puerto, iniciadas hace más de año y medio. La denuncia se sustenta en la falta de una declaración de impacto ambiental sobre la alteración de la playa, los rellenos, la ampliación del dique y las instalaciones para albergar una planta de energía eléctrica por olas. El colectivo incluye un informe de 1999 que detectaba graves afecciones. Por su parte la consejera de Medio Ambiente, Esther Larrañaga, defiende la idoneidad del proyecto.

Desde noviembre de 2005 se está acometiendo la ampliación del dique exterior del puerto de esta localidad guipuzcoana, que se alzará 17 metros sobre el nivel del mar y alcanzará 434 metros de longitud. El proyecto de la anterior legislatura se centraba en la solicitud de un dique de protección por parte del Ayuntamiento de Mutriku y se transformó en los despachos del Gobierno vasco en un puerto pesquero que, sin embargo, Agricultura y Medio Ambiente rechazaron. Entonces, el Departamento de Transportes lo transformó en un plan que se asemeja a un puerto mercantil, motivando duras críticas en el municipio al considerarlo desproporcionado. La primera fase es la de construcción del dique exterior.

En abril pasado el tema llegó al Parlamento y la consejera del ramo, Nuria López de Guereñu, aseguró que el proyecto del dique es necesario y legal. Dijo que la poca utilización actual -hay dos barcos pesqueros y suele tener una ocupación de apenas un 30%- se debe a la peligrosidad del acceso y manifestó que, con las nuevas obras, será operativo más días a lo largo del año. "Estamos abriendo oportunidades de negocio para el futuro", anadió. Por su parte, La consejera vasca de Medio Ambiente, Esther Larrañaga, ha defendido la idoneidad de este proyecto debido a la peligrosidad del acceso y ha asegurado que cumple con todas las normativas medioambientales.

Pero hoy, ecologistas y vecinos de Mutriku discrepan abiertamente. Tras más de un año de protestas han decidido llevar el tema a los tribunales. La plataforma ciudadana Hobetu Leike presentará en los próximos días en los juzgados de Eibar una querella contra las dos constructoras que acometen las obras al asegurar que carecen de la preceptiva evaluación de impacto ambiental. "Lo único que obtiene declaración de impacto es el proyecto de mejora de acceso. El resto de las obras carece" de la evaluación, señala la querella.

La plataforma ciudadana indica que en esa declaración de impacto realizada por el Gobierno en julio de 2004 se admite que "no se han analizado efectos ambientales concretos derivados de acciones detalladas del resto de proyectos implicados". La denuncia añade: "nos encontramos ante varios proyectos que bajo una falacia de declaración se están ejecutando".

"En ningún caso se evalúa ni mucho menos se obtiene una declaración de impacto positiva sobre las antedichas obra es infraestructuras energéticas, playa...".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La denuncia agrega que el Departamento de Medio Ambiente realizó, en junio de 1999, un informe preliminar sobre la ampliación del puerto de Mutriku, que detectaba afecciones diversas tanto al propio puerto como a la playa y los acantilados. "Supone una transformación tal que se asemeja más a actuaciones de nueva implantación en la costa", decía el informe, que advertía de la necesidad de realizar una evaluación de impacto global.

La plataforma Hobetu Leike pide a los juzgados la paralización inmediata de las obras y que la Fiscalía de Medio Ambiente realice una inspección del puerto. Además, se solicita la intervención del servicio de protección de la naturaleza de la Guardia Civil para que elabore un informe sobre el "peligro que para los ecosistemas han supuesto y suponen las labores denunciadas".

Las obras de este puerto se encuentran en el listado de 16 puntos negros del litoral vasco del último informe de Greenpeace, que considera que, junto a lo proyectado en Pasaia, es la obra portuaria de mayor gravedad al afectar "a playas y acantilados que gozan de los más elevados niveles de protección ambiental".

El estudio de este grupo ecologista revelaba la progresiva ocupación de la costa vasca: entre los años 1994 y 2005 la superficie urbanizada ha pasado del 5,2% al 6,5% y en el último año "han perdido sus características naturales 452 hectáreas de suelo".

Obras de construcción del nuevo muelle en Mutriku.
Obras de construcción del nuevo muelle en Mutriku.JESÚS URIARTE

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_