Miles de occidentales llegan a los puertos de Chipre desde Beirut
La Embajada española en Nicosia monta un dispositivo de acogida
Los puertos chipriotas de Larnaca y Limasol se han convertido en un portaaviones para los miles de refugiados occidentales que abandonaron apresuradamente Líbano, huyendo de los ataques israelíes. Unos 60 españoles formaban parte de un contingente que tenía prevista su llegada en la noche de ayer. La Embajada española en Nicosia ha montado ya un dispositivo de acogida.
Todo estaba organizado ayer para que los evacuados desde Líbano pudieran ser embarcados lo antes posible en vuelos regulares, con salida de madrugada, con destino a Atenas. Varios aviones militares, algunos enviados por Portugal, Francia y otros países estaban también dispuestos para la operación de repatriación.
A su llegada a tierra, los evacuados eran concentrados en instalaciones del puerto de Larnaca y asistidos por funcionarios de las embajadas occidentales y por personal de Cruz Roja, desde donde eran llevados a hoteles o a sus puntos de destino.
El miedo, el cansancio y la tensión afloraban en los rostros de los recién llegados, que mostraban señales de alivio por haber podido dejar atrás los bombardeos. "Aquello es un infierno", decía una madre con dos niños a su lado. La familia Guzmán García, con 11 miembros, y otro ciudadano español más fueron los primeros en llegar, a las 23.30 hora local (una hora menos en la España peninsular), de los 60 españoles que se esperaban. Con cuatro niños, esta familia residente en Líbano, que desembarcó de la fragata francesa Jean de Vienne, con unos 300 evacuados a bordo, sólo acertaba a repetir: "Estamos muy cansados".
Las calles de Larnaca y Limasol, dos importantes ciudades y centros turísticos en el litoral del sur de Chipre, de mayoría grecochipriota, se han visto en los últimos días inundadas de inesperados visitantes. Pero la organización de la operación de evacuación, que se ha desarrollado a toda prisa, ha permitido que nadie se quede sin ser atendido y trasladado a un lugar seguro.
Ayer por la mañana desembarcaron varios cientos de uno de los tres barcos fletados por el Gobierno sueco. A última hora de la tarde salían del puerto de Beirut con destino a Chipre un barco y una fragata británicos, el transbordador Iera Petra, fletado por el Gobierno francés y otros dos barcos suecos. En total, unas 2.500 personas evacuados, cuya llegada a Larnaca estaba prevista para la madrugada de hoy. Ésta es la mayor evacuación de civiles que llega a Chipre desde 1970.
La Embajada de España en Nicosia ha instalado un dispositivo en los puertos para atender a los evacuados que lleguen a Larnaca o Limasol. El embajador español, José Manuel Cervera, se encontraba al frente de la operación. "A unos les llevaremos al aeropuerto para que regresen a España vía Atenas, a otros los trasladaremos a los aviones militares de países europeos y, a los que no puedan salir de momento por estos medios, les instalaremos en hoteles hasta su evacuación, que será inmediata", aseguró.
El grueso de los evacuados que llegan a Chipre tienen pasaporte francés, muchos de ellos cuentan con la doble nacionalidad libanesa y francesa. Unos 800 de ellos ya han logrado llegar a Francia. La comunidad francesa en Líbano está integrada por unas 20.000 personas y al menos 8.000 de ellas se han acogido a la operación internacional de evacuación. Anoche nadie podía precisar nada en Larnaca sobre la hora de la llegada de los barcos ni sobre el número de los ciudadanos evacuados.
[Un millar de estadounidenses fueron evacuados ayer desde Líbano hacia Chipre. EE UU tiene en ese país a unos 25.000 ciudadanos, informa la agencia Efe. Reino Unido utiliza barcos de la Marina para trasladar a Chipre a sus ciudadanos. Un total de 180 de ellos viajaron en el destructor Gloucester. Suiza tramita también la repatriación de más de 400 conciudadanos que quieren salir del Líbano. Más de 136 suizos llegaron a Chipre a bordo del barco Iera Petra.
El primer ministro canadiense, Stephen Harper, viajó ayer a Chipre para coordinar la salida de sus ciudadanos de Líbano. La colonia canadiense en territorio libanés está integrada por 40.000 personas].
