_
_
_
_
_

Un virus reduce la población de rebecos del Pirineo a la mitad en los últimos cinco años

La población de rebecos ha disminuido el 50% en los últimos cuatro años a causa de la enfermedad del pestivirus, una afección muy semejante a la que sufrieron los cerdos y que se conoció como peste porcina. En el año 2002 se consideraba que en el Pirineo catalán había unos 12.000 ejemplares de rebeco. Ahora la población se habrá reducido a unos 6.000, según Ricard Casanovas, jefe del Servicio de Actividades Cinegéticas del Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat. Ante tal pérdida de ejemplares, que en algunas zonas llega al 90%, el Departamento de Medio Ambiente ha acordado prohibir la caza de rebecos en todas las reservas nacionales de caza excepto la del Freser-Setcases.

La zona más afectada es la reserva de caza Cerdanya-Alt Urgell, donde sólo quedan unos 600 rebecos, cuando la población había llegado a ser de 6.000. El 90% de los animales han fallecido en los últimos años. Pero en otras zonas, el número de rebecos enfermos llega al 45% o 50%, como en el caso del parque natural del Cadí-Moixeró. La enfermedad se dio a conocer el año 2001, en la zona occidental del Pirineo catalán. En 2004 entró con fuerza en la zona central, donde en estos momentos se aprecia la mayor afectación. La zona oriental es la única de Cataluña donde el recuento de animales ha ofrecido un saldo positivo.

El pestivirus es una enfermedad relativamente desconocida en los rebecos. De hecho, por sí mismo no es el causante de la muerte de los animales, pero provoca un debilitamiento y una bajada de defensas que los hacen más vulnerables.El servicio de Ecopatología de Fauna Salvaje de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona está investigando la epidemia, pero el cuerpo científico aún tiene dudas sobre ella. La transmisión puede deberse a la existencia de rebecos enfermos en el Pirineo francés, pero sólo es una hipótesis. Casanovas asegura que no se conocen las vías de transmisión ni cómo se puede combatir la dolencia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_