"Vine para pagar la dote de mi novia"
NATALIA JUNQUERA | Madrid
Perdió un ojo hace un año y siete meses en la valla de Melilla. Dice que la Guardia Civil le disparó tres veces con pelotas de goma y una acertó, de lleno, en su cara. Quince días después se despertó en un hospital de Málaga solo, desorientado y sin el ojo derecho. Arreyndrip Bertrand, de 24 años, se había despedido de sus padres y sus nueve hermanos hacía un año en Camerún.