El homenaje del museo a un gorrión
El penúltimo capítulo de la corta vida del gorrión holandés muerto de un disparo después de haber derribado 23.000 fichas de dominó dispuestas para batir un récord, se cerró ayer. El autor del tiro recibió una multa de 200 euros por destruir un ejemplar de una especie protegida. Toda una victoria moral para la Asociación Nacional Protectora de Aves, uno de cuyos miembros, Hans Peeters, lamentó airado en su día las drásticas medidas adoptadas contra un simple pajarito. Endemol había vendido a 16 países la transmisión, en directo, del derribo de 4.155.476 fichas de dominó -nuevo récord mundial- desde el Centro de Exposiciones de Leeuwarden. "No hubo más remedio que hacerlo. Fue una pena", señaló en nombre de la emisora Jeroen van Waardenberg. Decididos a no olvidarle, el Museo de Ciencias Naturales de Rotterdam ha encontrado la forma de honrarle. Lo pondrán en una vitrina especial durante la muestra que preparan sobre los gorriones domésticos. El resto del año se sumará a la colección permanente.
