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TIROS LIBRES | BALONCESTO | Octava jornada de la Liga ACB
Columna
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En la escalera

Una carrera deportiva se asemeja mucho a una escalera. Está llena de peldaños, unos cuestan más que otros, no debes quedarte nunca quieto pues atentas contra el sentido de su existencia y salvo que seas Michael Jordan, por mucho que subas, tarde o temprano inicias el descenso. El baloncesto español cuenta en la actualidad con un buen número de jóvenes muy capacitados ubicados en la zona de subida de esa escalera. Fijémonos en tres de los más atractivos. Dos han incrementado notablemente su velocidad de ascensión y uno anda un poco estancado.

Estando casi todo dicho de él, resulta motivo de alegría observar que a sus habituales dotes de espectacularidad y su capacidad para sorprender, Navarro ha dotado a su juego de una extraordinaria regularidad que le encaminan hacia una espléndida madurez en su juego. Tachado a veces de cierta inconsistencia, Navarro ha respondido en los últimos meses a dos grandes desafíos. El primero se le presentó en el último Europeo de selecciones, donde la ausencia de Gasol le colocó como gran referencia del equipo. El segundo le llegó cuando el Barça se encomendó a Ivanovic. El peculiar técnico no tardó mucho en desafiar públicamente a su nuevo jugador emplazándole a sacar mayor provecho de sus enormes cualidades. Ambos retos han sido contestados con humildad y grandeza. A pocos kilómetros del jugador del Barça desarrolla su actividad Rudy Fernández. El joven verdinegro parecía estancado en uno de los primeros peldaños, una vez que su primera temporada en la élite terminó con una excelente nota. Pero entre unas cosas y otras, su progresión pareció estancarse el año pasado, con lo que surgieron dudas sobre él. Presionado por las grandes expectativas puestas en entredicho, Rudy ha reanudado su crecimiento con unas actuaciones muy meritorias. Mientras, en Madrid, Sergio Rodríguez atraviesa una etapa de desconcierto. Su temprana explosión auguraba lo mejor, pero le está costando tirar para arriba. Los problemas de su equipo, la mayor presión a la que está sometido al dejar de ser una novedad, quién sabe si razones de otro tipo, el caso es que Sergio no está carburando y Orenga ha optado por dar el mando en plaza al veterano Azofra.

Tres jugadores jóvenes, tres escalones diferentes. Lo importante no es dóde están, sino hacia dónde van.

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