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Los obispos expresan sus "dudas" ante los contactos

Los obispos están recelosos, según el presidente de la Comisión Episcopal de Enseñanza, el obispo Antonio Dorado. Titular de la diócesis de Málaga y uno de los veteranos de la Conferencia Episcopal -fue el negociador de los temas educativos ante los gobiernos de Felipe González-, Dorado expresó ayer "ciertas dudas" después de la reunión del presidente del Gobierno con los convocantes de la manifestación del sábado pasado. "Esas promesas se han hecho repetidas veces, y en varias ocasiones, tras esos diálogos, no se ha llegado prácticamente a ningún resultado", dijo en conferencia de prensa.

El presidente de la Comisión Episcopal de Enseñanza también mostró su sorpresa por la postura del presidente Rodríguez Zapatero sobre la enseñanza de la religión, declarada como "inamovible" por el Gobierno en futuras negociaciones. "No exigimos un pacto basado en nuestros intereses particulares, sino en el marco de la legislación vigente. Nos atenemos a que se cumpla lo que se dice en los acuerdos internacionales firmados en 1979 entre la Iglesia católica y el Estado español, obligatorios para ambas partes mientras no se denuncien", declaró.

El obispo de Málaga recordó que "en la presidencia de Felipe González hubo "un intento de acuerdo generoso", en el que la asignatura alternativa a la religión católica trataría sobre Sociedad, Cultura y Religión, "de forma que sería obligatorio para todos estudiar el hecho religioso". Dicho proyecto "se hizo con actitud de diálogo y en el mismo colaboró gente de la Iglesia católica y gente distante de ella", añadió.

Discusión episcopal

La Conferencia Episcopal abordará en asamblea, a partir del lunes, el estado de las relaciones con el Gobierno y las últimas ofertas del Ejecutivo en busca de acuerdos sobre la reforma educativa. Los obispos estudiarán también las críticas vertidas contra la cadena Cope por algunos prelados de Cataluña, aunque ninguna de estas cuestiones estén en el orden del día.

El discurso de apertura de esta asamblea general, a la que suele asistir un centenar de prelados, incluidos los eméritos, correrá a cargo del presidente de la CEE y el obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, sustituto del cardenal Rouco en el liderazgo episcopal desde marzo pasado.

Según indicaba ayer la agencia Efe, citando fuentes eclesiales, un número indeterminado de prelados, en desacuerdo con el método con el que se han desarrollado los encuentros con el Gobierno y en la "forma y oportunidad" con que se ha informado de estos encuentros y de la visita de la vicepresidenta del Gobierno al Vaticano desde la secretaría general de la CEE, plantearán estas cuestiones durante las sesiones secretas de este plenario.

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