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Entrevista:ISABEL COIXET

"A veces hablo mucho y no digo nada"

Pregunta. La plataforma petrolífera de La vida secreta de las palabras está recreada en Navalcarnero. ¿Morir de exotismo?

Respuesta. Yo es que, puestos a ser exóticos, estoy dispuesta hasta a comprar una cacatúa que venga de Tailandia. En Navalcarnero pasamos grandes momentos.

P. Dice que los actores han cobrado poco. No se entiende, al precio que está el crudo.

R. Un actorazo como Tim [Robbins], que ha ganado un Oscar, rebajó su caché. Pero lo hizo muy a gusto.

P. Ellos han cobrado poco. ¿Y usted qué tal?

R. Yo, fatal. Las mujeres tenemos un problema: pedimos lo mismo que los hombres y nos pagan menos. Tenemos que pedir más para que nos paguen igual.

P. No se había dado cuenta hasta ahora.

R. Es que yo me despierto tarde a todo.

P. "Quiero que digan que es una jodida obra maestra". ¿No se pasa?

R. Sí, pero es lo mismo. Si dicen que es una jodida obra maestra, el tiempo la colocará en su sitio, que es simplemente una obra maestra.

P. Premiaron su peli en Venecia por desvelar el valor del silencio. Con lo que usted raja.

R. Yo es que soy como una montaña rusa: o hablo por los codos o no digo nada. Y a veces puedo hablar mucho y no decir nada.

P. Espero que no me haya tocado la china.

R. No, no, por Dios [ríe].

P. ¿Ha sido usted una gran adquisición para el cine?

R. Creo que en la pregunta de la obra maestra se me ha acabado ya la prepotencia. No sé si he sido una gran adquisición. En todo caso, ha sido fundamental que me dejaran hacer cine.

P. La vida secreta de las palabras, Cosas que nunca te dije. ¿Trabaja a ver si se aclara con la comunicación?

R. Trabajo para que entre lo que hago, lo que digo y lo que siento no haya ninguna diferencia. Creo que es una lucha que no se acabará nunca.

P. ¿Cuáles son sus obsesiones?

R. Los mensajes que no llegan, las malas interpretaciones de las cosas que digo, la injusticia, la empatía con el dolor ajeno, la comida...

P. Tiene usted una obra completa más triste que un funeral.

R. ¿En serio? Pues no me había dado cuenta.Yo creí que hacía comedias locas.

P. "Gracias a Dios soy miope". ¿Le asusta lo que hay que ver?

R. ¡Ay, sííí! A mí la claridad no me va nada. En el claroscuro es donde yo veo mejor.

P. Se ven menos los defectos, los michelines...

R. Yo para los defectos tengo un ojo que ni la oscuridad lo tapa. Y los michelines me preocupan, pero es que me gusta mucho la Guía Michelin.

P. Dice que le gustaría trabajar con Bardem. ¿Sólo en el plano laboral?

R. Tengo grandes amigos actores con los que me gustaría mucho trabajar. Pero creo que enrollarse con un actor debe de ser una tortura... Son unos narcisos todos y hay que hacer de baby sitter.

P. Pues igual a muchas no les importaba ser la baby sitter de Bardem.

R. Pues yo me imagino más siendo la baby sitter de Keanu Reeves, que es un actor horrible con el que no me gustaría trabajar. Pero hacerle un canguro de cuando en cuando...

P. Rechazó dirigir Million Dolar Baby. ¿Siempre se pone tan estupenda?

R. Es que en el paquete iba una actriz a la que me costaba creerme en ese personaje, Sandra Bullock. Empiezo a saber en qué proyectos puedo involucrarme y cuáles es mejor no hacer.

P. Como catalana, ¿cuántos telediarios cree que le quedan a Maragall?

R. Con el cariño que yo le tenía, de verdad... Me siento como Pepe Isbert en El pisito: "Con la alegría que yo traía...", "El día más feliz de mi vida...". Creo que estamos perdiendo una oportunidad brutal para hacer las cosas bien.

P. Ha sufrido mucho por amor.

R. Pero ya no. Un día me desperté y pensé: "Ya no voy a sufrir más". Es que yo no soy nada mística ni nada de Paulo Coelho.

P. ¿Qué les pasa a los hombres?

R. Que tienen miedo. A comprometerse, a ceder parcelas de poder... Creo yo. Pero no me haga mucho caso.

P. ¿Cuál es el cuento infantil que más le ha influido?

R. Pulgarcito. Nunca conseguí entender cómo esos padres abandonaban a ese puñado de niños en el bosque y luego los niños volvían como si tal cosa y no les hacían ningún reproche.

P. Pues yo estaría con Freud: ahí sí que había que matar al padre.

R. Desde luego. A uno que te abandona en el bosque para que te coman los ogros y las fieras, sí.

Isabel Coixet, el martes en Madrid.
Isabel Coixet, el martes en Madrid.RICARDO GUTIÉRREZ

PERFIL

Con 43 años y una hija, que no se parece a ella "porque es superequilibrada", se confiesa una gran espectadora de cine y amante de descubrir restaurantes y de leer críticas gastronómicas. Le gusta todo tipo de lectura y sentarse en un café a ver pasar a la gente. El día de mañana se ve "con el tacataca y diciendo:'¡Acción!"

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