Amnistía acusa a España y Marruecos de vulnerar derechos de inmigrantes

Amnistía Internacional (AI) acusó ayer a España de "graves y repetidas violaciones" de los derechos humanos de inmigrantes, refugiados y solicitantes de asilo en Ceuta y en Melilla. Ésa es la principal conclusión de una misión de la ONG que durante siete días -del 16 al 23 de septiembre- visitó las ciudades españolas y las localidades marroquíes de Oujda, Nador y Tánger, tras la muerte de 14 subsaharianos que intentaron saltar la valla fronteriza de las ciudades autónomas.

"Las pruebas que hemos reunido demuestran que los agentes [españoles y marroquíes] encargados de hacer cumplir la ley utilizaron fuerza de manera desproporcionada, incluidas armas letales [para hacer frente a las avalanchas de inmigrantes]. Hirieron y mataron a personas que trataban de cruzar la valla. A muchas de las personas gravemente heridas que consiguieron entrar en territorio español las empujaron de vuelta al otro lado de la valla sin formalidad legal alguna y sin asistencia médica", declaró el director de la misión de la ONG, Javier Zúñiga.

AI, que se basa en testimonios de inmigrantes que intentaron entrar en las ciudades autónomas, exige a las autoridades españolas y marroquíes un protocolo público sobre el uso de la fuerza por los funcionarios que trabajan en la zona, una investigación independiente de las muertes y lesiones ocurridas en los últimos meses y el control judicial de las grabaciones de las cámaras de los perímetros fronterizos. Además, insta a ambos Gobiernos a "poner fin de inmediato a todas las expulsiones y devoluciones de inmigrantes y solicitantes de asilo de origen subsahariano".

En el acto estuvo presente Arrah-Mary Magdalene, hermana del camerunés que fue hallado muerto el 29 de agosto junto a la valla de Melilla, quien pidió al Gobierno que investigue la muerte de su hermano.

Proceso de devolución

AI constató también "serias irregularidades" en el proceso de devolución a Marruecos de 73 subsaharianos, que "en ningún momento tuvieron constancia de que tenían un abogado" y no conocían sus derechos, porque "se les dijo que se les enviaba a la Península". Según la responsable de política interior de AI-España, Virginia Álvarez, tras entrevistarse con varios de ellos en Tánger comprobaron que ninguno llevaba ningún documento de devolución ni de expulsión y que había cuatro posibles solicitantes de asilo y dos que ya lo habían pedido, informa Efe.

Álvarez insistió en que las devoluciones ilegales de inmigrantes no se producen sólo cuando el extranjero se halla entre las dos vallas, sino también cuando ya está en Ceuta y Melilla.

La situación en Marruecos fue descrita por Philip Luther, investigador de AI para ese país, quien afirmó que entre los centenares de subsaharianos que hay detenidos en dos bases militares, hay más de 80 que habían solicitado asilo al ACNUR y, al menos, uno que ya tenía estatus de refugiado. No han tenido acceso a un abogado ni a un juez y, "lo más preocupante", es que Marruecos no los considera detenidos, sino "reagrupados", y les ha comunicado que, por el momento, no reconoce la documentación de ACNUR.

La Guardia Civil publicó ayer un comunicado en el que reitera que sus agentes actuaron "de manera proporcionada y ajustada a la legalidad".