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La Sinfónica y la Sociedad Coral de Bilbao cantan contra la guerra

La Quincena ofrece el martes el 'War Requiem' de Britten

Maribel Marín Yarza

El músico británico Benjamin Britten recibió el encargo de componer una obra para celebrar la reconstrucción de la catedral de Coventry, destrozada por los bombarderos alemanes durante la II Guerra Mundial. Acabó por escribir War Requiem, todo un canto antibelicista. La Sinfónica de Bilbao, la Sociedad Coral y el Coro del Consevartorio de esta capital la interpretarán el martes en el Kursaal donostiarra.

La Quincena Musical de San Sebastián presenta este concierto como uno de los platos fuertes de Acordes de guerra y paz, el programa con el que conmemora el 60º aniversario del fin de la contienda bélica. Sobre el escenario, 250 personas clamarán contra la guerra: una orquesta sinfónica, otra de cámara, dos coros, tres directores, otros tantos solistas,... "War Requiem es una obra de enorme interés musical. Está muy bien pensada y estructurada", explicó ayer Juanjo Mena, titular de la Sinfónica. "Se escucha con facilidad y emoción", añadió el titular de la Sociedad Coral de Bilbao.

Britten "se dedicó a observar, como buen inglés", para después escribir de forma muy distinta a sus coetáneos, según Mena. Estructuró su alegato antibelicista en tres partes: en la primera, planteó una singular misa de réquiem, crítica con la pasividad del pueblo llano ante la guerra; en la segunda, el compositor introdujo poemas "desgarradores" de Wilfred Owen sobre el frente de batalla y en la tercera... "En la tercera, Britten plantea un canto de esperanza" a través de las voces de los más pequeños.

La Sinfónica de Bilbao y las dos corales abordarán el War Réquiem junto a la soprano Nancy Gustafson, el tenor Agustín Prunell Friend y el barítono Tomás Mohr. Todavía quedan unas 200 entradas para verles actuar y profundizar así en la obra de un compositor que esta siendo redescubierto en España.

Su música, según Mena, no puede considerarse contemporánea. "No está lejos de Mahler y Wagner", abundó. "Lo contemporáneo del War Requiem es el grito emocionante y sincero contra el horror de la guerra. No hay más que mirar al mundo para ver que la obra está de actualidad", observó José Luis Ormazabal, director del coro del Conservatorio.

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