_
_
_
_
_

La sombra de un pantano

El embalse de Pedrezuela está al 18% de su capacidad por la sequía

"Día de pesca en un erial marciano". Así podría titularse la estampa tomada en Pedrezuela, a 40 kilómetros de Madrid, esta semana. El embalse tiene sed. De sus 40 hectómetros cúbicos de capacidad, las aguas sólo cubren 7,2 porque hace meses que no llueve. Está al 18% de su capacidad total. El descenso de las aguas ha dejado al descubierto un erial de tierra rojiza que recuerda a las imágenes enviadas desde Marte por la nave espacial europea Mars Express.

La sombra quedó lejos, donde antes estaba la orilla. Así que la sombrilla se hace indispensable para cualquier pescador. El baño está prohibido al igual que en el resto de los 14 embalses de la Comunidad gestionados por el Canal de Isabel II. Quien no pueda resistir la tentación de lanzarse a las aguas de Pedrezuela se arriesga a ser multado hasta con 1.500 euros, si es sorprendido por la Guardia Civil o una patrulla de control.

El embalse de Pedrezuela se construyó en 1968, toma sus aguas del río Guadalix y es uno de los más pequeños de la Comunidad; es 10 veces menor, por ejemplo que el embalse del Atazar (450 hectómetros cúbicos). La media de los embalses que abastecen Madrid es del 43% de nivel.

Pedrezuela también se secó en 1994. El Canal de Isabel II decidió abrir las compuertas de la presa para abastecer a los madrileños. Entonces emergieron los recuerdos: el puente de piedra, la carretera comarcal, los restos de dos molinos de agua y los tocones de los árboles que habían poblado la zona. Ahora, empiezan a asomar de nuevo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_