_
_
_
_
_

'La entretenida', de Cervantes, sube al escenario en una versión pop

Helena Pimenta dirige una obra que apenas ha sido representada

Elsa Fernández-Santos

Madrid, años sesenta. La entretenida, de Cervantes, viaja del siglo XVII a la era del desarrollismo en España. Los personajes cervantinos llevan minifalda y se mueven en una ciudad-collage inspirada en el Equipo Crónica. Helena Pimenta dirige la obra para la Compañía Nacional de Teatro Clásico, y Eduardo Vasco abre así su etapa al frente de la compañía. La entretenida se estrena el próximo 2 de febrero en el teatro Pavón de Madrid.

Una chica en minifalda asoma sus piernas en el cartel que anuncia el estreno de La entretenida. Un icono pop para celebrar el IV centenario de Cervantes. La Compañía Nacional de Teatro Clásico arranca su nueva etapa con una comedia cervantina apenas representada. Yolanda Pallín, autora de la adaptación, justifica así esta versión pop de la obra: "En los sesenta coexistía una forma muy arcaica de pensamiento frente a una modernidad creciente. Fueron unos años en que se reivindicó mucho a las clases trabajadoras. Se trata de una época estupenda para situar en ella La entretenida, nos permite ir a la esencia de lo que quería contar Cervantes". "Por supuesto", advierte Pimenta, "el montaje huye de la mitificación de los años sesenta que se hace hoy día. Es una obra muy poco maniquea".

La entretenida forma parte de un conjunto de obras que Cervantes reunió en 1615 bajo el título Ocho comedias y ocho entremeses nuevos nunca representados, que conforma lo que se ha dado en llamar la segunda época de su teatro. "Si exceptuamos los entremeses, los textos teatrales de Cervantes han sido representados con cuentagotas", explica Eduardo Vasco. "Es un autor que interesa mucho, pero como dramaturgo se sale en exceso de los moldes que, aun en nuestro tiempo, establece la ortodoxia y la lógica de la exhibición teatral". "La entretenida", añade Vasco, "es una comedia rara y desconocida para el público, en la que muchos han leído una reacción de Cervantes ante Lope y la comedia nueva. Pocas piezas cuentan con posiciones tan dispares respecto a su valía, sentido y situación dentro de la historia de la literatura dramática. Es, sin duda, una obra compleja: forzada por la omnipresente manera de un Lope reinante en la escena, marcada de forma inevitable por La Celestina, heredera del mejor teatro latino -Terencio y Plauto-, y de la Commedia dell'arte, La entretenida es un ejercicio de estilo de fina inteligencia transgresora".

Batalla perdida

"La entretenida", escribe Helene Pimenta, directora del montaje, "es la historia de un fracaso, de una batalla perdida". "Sorprende especialmente en esta comedia el tratamiento dado a los personajes humildes. La mirada del autor se detiene en ellos como si quisiera demostrar que son dignos de existir en la ficción. Al otorgarles vida propia, preocupaciones y estímulos personales que les hacen actuar, los eleva a la categoría de personajes dramáticos".

Sobre el escenario de La entretenida, un seiscientos de color rojo es suficiente para situarnos en la época. Al fondo, algunos edificios simbólicos de Madrid nos confirman el lugar. "Una gran tela representa el cartel de Lo que el viento se llevó, la ilusión cinematográfica", explica Helena Pimenta. La obra (que iniciará la gira por España el próximo 15 de abril y que finaliza en Oviedo el 28 de mayo) está en manos del primer elenco de la compañía: Joaquín Notario, Montse Díez, Javier Mejía, José Luis Santos, Pepa Pedroche, Jordi Dauder, Miguel Cubero, Toni Misó, César Sánchez, Ione Irazabal, Juan Meseguer, Jorge Gurpegui, Emilio Buale, Rodrigo Arribas, Paco Paredes y Xavi Montesinos.

Aunque La entretenida se estrena el próximo miércoles (2 de febrero), la Compañía Nacional de Teatro Clásico ofrecerá, desde hoy al domingo y el martes 1, una serie de representaciones a mitad de precio (práctica habitual en otras capitales europeas) para rodar así el montaje.

Una escena de <i>La entretenida</i> durante los ensayos.
Una escena de La entretenida durante los ensayos.CRISTÓBAL MANUEL

Combate

Los guantes de boxeo elegidos para el nuevo número de la revista de la Compañía Nacional de Teatro Clásico ilustran bien lo que Eduardo Vasco, su joven director (32 años), pretende hacer esta temporada: enfrentar el archiconocido teatro de Lope de Vega con el de Cervantes.

Mientras Lope de Vega fue el triunfador de su época ("Lope barre todo lo que hay a su alrededor, aunque luego también lo paga"), Cervantes murió con el dolor de no haber sido reconocido como autor dramático. Cervantes sufrió el moralismo, conservador y absolutista, de su época. Ninguneado en los corrales de la época, donde arrasaban las obras de Lope, el autor del Quijote vivió con "rabia" el rechazo a representar sus obras.

"La entretenida", explica Yolanda Pallín, "es una parodia de la comedia nueva tanto como el Quijote lo es de los libros de caballerías".

"Poner en escena La entretenida",

añade Pallín, "no es sólo un gesto de reconocimiento, es un gesto de futuro. Los valores que denuncia siguen estando vigentes en las ficciones de hoy: la violencia de género, el valor de los celos como certificado del amor, las ascensión por medio de la astucia y el erotismo...".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Elsa Fernández-Santos
Crítica de cine en EL PAÍS y columnista en ICON y SModa. Durante 25 años fue periodista cultural, especializada en cine, en este periódico. Colaboradora del Archivo Lafuente, para el que ha comisariado exposiciones, y del programa de La2 'Historia de Nuestro Cine'. Escribió un libro-entrevista con Manolo Blahnik y el relato ilustrado ‘La bombilla’

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_