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El euro rompe la barrera de 1,35 dólares por primera vez en la historia

La divisa estadounidense ha retrocedido un 6,8% en lo que va de año

El euro rompió ayer la barrera de 1,35 dólares por primera vez en su historia. Los mercados de divisas desafiaron a la moneda estadounidense y apostaron a que el desequilibrio de las cuentas públicas y el déficit exterior en EE UU son problemas que persistirán a lo largo de 2005. Esta debilidad en la economía estadounidense ha sido el detonante del desplome del dólar este año: desde enero ha retrocedido un 6,8% frente al euro.

El mercado de divisas no da tregua al dólar. A pesar de haber frenado su acoso contra la moneda estadounidense momentáneamente en las primeras semanas de diciembre, el euro rompió ayer el récord de 1,3465 que había alcanzado a finales del mes anterior. Una vez superada esa marca, la carrera alcista de la jornada no tomó respiro y llegó a alcanzar 1,3507 dólares.

La subida del volumen de pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos, que se situó por debajo de las expectativas de los analistas, fue uno de los principales factores en los que se escudaron los intermediarios para volver a apostar contra el dólar. La transacciones entre dólar y euro representan el 30% del mercado de divisas.

Los intermediarios mantuvieron la certeza de que Washington no moverá ninguna ficha para frenar la actual debilidad del billete verde, desoyendo los llamamientos de autoridades políticas y económicas de Europa y Asia que insisten en la necesidad de equilibrar la cotización. Los exportadores europeos y asiáticos sufren ante un dólar débil ya que encarece sus productos y les hace más difícil competir en ese mercado. La otra cara de la moneda son las exportaciones de EE UU, que ganan competitividad en los mercados extranjeros.

En lo que va de año la divisa europea se ha apreciado un 6,8% frente al dólar. La caída ha sido crónica a lo largo del año, pero se acentuó a partir de noviembre cuando la victoria de George W. Bush en las elecciones presidenciales de EE UU incitó a los intermediarios a pronosticar que el desequilibrio del déficit comercial y presupuestario se mantendrá a largo plazo. Estos dos factores se han entronado como el principal lastre para la cotización del dólar. La política económica que esgrime la Administración de Bush no ha dado señales de intentar corregir esos desequilibrios.

La economía de EE UU necesita para financiar su déficit comercial un dólar débil, que abarate sus exportaciones y facilite el saldo positivo de su balanza de pagos. Las dudas sobre el vigor del crecimiento de la economía de EE UU y las posibilidades de la mayor economía del mundo de financiar su déficit han arrastrado fuertemente a la baja al billete verde en los últimos meses.

Peligro mundial

La caída del dólar este año ha sido uno de los principales quebraderos de cabeza para los ministros de Economía de la zona euro, ya que puede lastrar el crecimiento de los 12 países que comparten la moneda. El ministro francés de Economía, Hervé Gaymard, afirmó ayer que la caída del dólar puede degenerar en "una catástrofe mundial" y que EE UU debe comprender "absolutamente" que es necesaria una gestión internacional "coordinada" para superar la situación, informa Efe.

"Si seguimos en la tendencia actual, podemos imaginar una situación catastrófica mundial, tanto para los europeos, que tienen una moneda sobrevalorada, como para los asiáticos, con sus activos en euros, y para los estadounidenses, porque los tipos aumentarán", declaró Gaymard.

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