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LAS NUEVAS ESTACIONES DEL METRO DE MADRID

El metro unirá Tetuán, Ciudad Lineal, Hortaleza y Chamartín

Las calles de Caleruega, Bambú, Capitán Cortés y Bacares tendrán parada propia

Tetuán, Chamartín, Ciudad Lineal y Hortaleza quedarán unidos por el metro en su parte norte con la ampliación de las líneas 1 y 4 que prepara la Consejería de Transportes. La línea 1 será prolongada desde la plaza de Castilla a la estación de Chamartín -donde será construido un gran intercambiador-, a la avenida de Burgos y al Pinar de Chamartín. En esta estación, que también será un intercambiador, terminará igualmente la extensión de la línea 4, que, desde el parque de Santa María, tendrá otras dos estaciones en Apóstol Santiago y el barrio de San Miguel.

Transportes ha empezado a desarrollar los futuros nudos de comunicación ferroviaria subterránea al norte de la capital. En esta zona, además de la prolongación del metro de las líneas 1 y 4, será construido el metro ligero que, desde el nuevo intercambiador de Pinar de Chamartín, llegará a Virgen del Cortijo y a los nuevos barrios de Sanchinarro y Las Tablas.

Asimismo, y en un futuro más lejano, el otro intercambiador, el de la estación de Chamartín, será el inicio de otra línea de metro hacia la "prolongación del paseo de la Castellana", según consta en el proyecto del Gobierno regional.

Por el momento, Transportes ya ha sacado a concurso la extensión de las líneas 1 y 4, que será adjudicada próximamente. El proyecto conllevará la construcción de cinco nuevas estaciones, dos de ellas intercambiadores, con una extensión de 5,3 kilómetros y un presupuesto total de 276 millones de euros.

El plazo de construcción es de 30 meses desde el inicio de las obras, por lo que entrará en funcionamiento a finales de 2007 y será utilizada por más de 60.000 personas, según el Gobierno regional.

103 millones de euros

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La línea 1, que actualmente termina en plaza de Castilla, será extendida con tres nuevas paradas. La primera transitará por la estación de Chamartín, donde actualmente, además de las líneas de cercanías y largo recorrido de Renfe, también tiene una estación la línea 10. Esta última será demolida para construir de nueva planta un gran intercambiador que permitirá a los viajeros cambiar entre los servicios de Metro, Renfe y autobuses. El coste total del intercambiador alcanzará los 103 millones de euros.

Desde este punto, el suburbano seguirá una trayectoria hacia el noreste hasta alcanzar la segunda estación, que estará situada en la confluencia de la avenida de Burgos con la calle del Bambú. Esta parada, al igual que el resto, contará con ascensor para las personas con problemas de movilidad y escaleras mecánicas.

El túnel virará en este lugar a la derecha para continuar en dirección este hasta la tercera y última parada de la prolongación, situada bajo la calle Arturo Soria en su confluencia con la calle de Caleruega, junto al Pinar de Chamartín y de la avenida de San Luis.

Aquí será construido un intercambiador con tres andenes, que permitirán el tránsito de los viajeros entre la línea 1 y 4. En el futuro, aquí también llegará el metro ligero desde los nuevo barrios del norte.

Entre esta estación y la del parque de Santa María, la línea 4 contará con dos nuevas estaciones. Una estará situada en la zona verde del parque de Manoteras, en la esquina que forman las calles de Bacares y la de Vélez Rubio.

La segunda tendrá los andenes bajo la calle de la Virgen del Carmen, entre las confluencias de esta vía con las calle Capitán Cortés y Miranda de Arga, junto al barrio de San Miguel y muy cerca del de la colonia Nuestra Señora del Henar.

Los 5,3 kilómetros de nuevos túneles serán construidos con dos técnicas. La primera será la utilizada en todos aquellos tramos en los que el metro deba transitar bajo edificios y calles y es el denominado método belga o tradicional de Madrid. Este sistema, en resumen, es el más antiguo de los aplicados en el metro y consiste en excavar el túnel de forma manual y con maquinaria ligera.

Allí donde sea posible, en espacios abiertos que puedan permanecer cerrados al tráfico durante varios meses, se utilizará el sistema de "losa de cubrición y excavación bajo ésta", según el proyecto. Este método consiste en allanar el terreno bajo el cual quiere excavarse el túnel, depositar sobre él una enorme losa de hormigón de más de 15 metros de ancho y excavar el túnel bajo ella.

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