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Reportaje:XIII BIENAL DE FLAMENCO | PARRILLA DE JEREZ | Guitarrista y compositor

"La música necesita silencios"

Margot Molina

A Manuel Fernández Molina, jerezano de 60 años, se le ha perdido en las ramas de su árbol genealógico el origen de su apodo: Parrilla. "Creo que mi padre tampoco lo supo nunca", recuerda el guitarrista y compositor cuyo nombre aparecerá siempre en la historia del flamenco ligado al de Paquera de Jerez. La cantaora racial y profunda, desaparecida este año, con quien compartió escenarios durante 35 años. Pero Parrilla es mucho más que el guitarrista de Paquera. Tuvo un antes y tiene un después plagado de proyectos. Esta noche interviene en la Bienal con Historias de arte, que podrá verse en el Museo de Artes y Costumbres populares.

Pregunta. ¿Cuándo comenzó usted a tocar la guitarra?

Respuesta. Tenía 12 años cuando empecé y con sólo 13 debuté en la Feria de Sevilla.

P. Viene de una dinastía gitana de artistas, ¿aprendió de su padre?

R. Mi profesor de guitarra fue Rafael el Águila y también mi padre. Él era polifacético y se dedicó al flamenco profesionalmente cuando tenía más de 50 años. Era más bailaor que otra cosa, aunque también cantaba. La guitarra la tocó cuando era joven.

P. ¿Qué pasó después de su debú sevillano?

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R. Estuve en muchos tablaos importantes en Madrid, en la Costa del Sol. En 1963 participé con Lola Flores en el espectáculo Arte español; también toqué con Rafael Farina, con Luisillo.

P. ¿En qué ha cambiado el flamenco desde aquellos años?

R. La gente dice que la cosa va evolucionando, pero yo creo que el arte debe evolucionar por sí solo, no tiene que fusionarse con nada. Los que se fusionan son los bancos. El flamenco tiene raíces propias, riqueza y duende como para crear desde dentro, desde la misma pureza. Claro que cada uno puede ganarse la vida como quiera y a mí muchas de esas músicas me gustas pero, ¡ojo!, que no le llamen flamenco.

P. ¿Quién fue Paquera de Jerez?

R. Una artista con un corazón muy grande y una voz portentosa para expresar sus sentimientos. Comenzamos a trabajar juntos en 1969 y han sido 35 años muy buenos, pero también he hecho otras cosas. Tengo cuatro discos en solitario. El último, Nostalgia, lo grabé en Ginebra en 1997, y he grabado ocho o nueve con Curro Malena, además de con José Menese, Pansequito, Macanita...

P. ¿Hacia dónde caminan los nuevos guitarristas?

R. Van a ver quién da más notas en menos tiempo. Es cómo si fueran a pasar un examen de mecanografía, pero la música necesita silencios, melodía, partes más lentas y otras rápidas. Hoy lo único que saben hacer es correr como en un maratón.

P. ¿Qué planes tiene?

R. De momento estoy comprometido con Historias de arte y tengo otras propuestas.

P. ¿Publicar sus poemas?

R. No, esos están en la computadora. Hay más de 700 y casi todos de amor, porque sin amor no hay ni música, ni nada; ni siquiera un buen guiso.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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