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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

El lenguaje emocional sobre Gibraltar

Me atrevo a dirigirme a su periódico sobre el problema de Gibraltar y las contestaciones cínicas del gobierno de su graciosa majestad la Reina Isabel II a nuestras demandas con esta frase sobre nuestras emociones. El Reino Unido y el gobierno del señor Caruana, como casi todos los gobiernos de la Roca, siempre se han portado de forma grosera, cínica e impertinente con el Reino de España y, sobre todo, con los andaluces y gaditanos en especial.

Ahora, parte de la culpa la tenemos nosotros por no tomar medidas concretas. Coincido con las afirmaciones de Londres sobre que España debe dejar de utilizar "el lenguaje emocional". Los gibraltareños utilizan nuestras carreteras, les hicimos una magnífica autopista sin peaje para llegar a sus residencias de Sotogrande, Marbella, La Alcaidesa, etc., donde se instalan con las ventajas de no pagar impuestos como "residentes" y transitar con sus vehículos y barcos libres de impuestos.

Yo me pregunto, ¿será tan difícil empezar a controlar en serio a esta gente y ver los días que "pernoctan" en nuestro territorio y aplicarles la legislación fiscal española como residentes en nuestro país? Tenemos medios para hacerlo vía controles de entrada y salida minuciosos. ¿Podemos cobrarles un impuesto o tasa por usar nuestras carreteras? ¿Podemos gravar a toda sociedad gibraltareña o con sede en Gibraltar o gestionada desde allí con una tasa especial? ¿Así como transferencias, giros, tarjetas de crédito, etc.? ¿Podemos gravar las embarcaciones deportivas de Gibraltar que atraquen en España y usen nuestras aguas territoriales? A su vez, debemos aplicarles medidas severas de entrada y salida de su "Roca", controles largos, férreos y complicados por mar y tierra, complicar el uso de su aeropuerto al máximo. ¡Seamos "cínicos" como ellos! Ya está bien de que estos señores jueguen al golf, usen nuestras carreteras, se instalen en nuestro país, naveguen por nuestras costas, disfruten de todo lo que ofrecemos pagando menos que nadie y, además, se permitan el lujo de cachondearse de nosotros...

Señores de La Línea de la Concepción, Jimena, Conil, Algeciras, San Roque, de la Junta y del Gobierno, por nuestra dignidad, no más enfrentamientos verbales, no más reuniones que terminan siempre en el status quo que persigue la política de Gran Bretaña en el contencioso de Gibraltar. ¡Hablar para no hacer nada! Tasas, impuestos, controles, dificultades a los ciudadanos de la Roca y que jueguen al golf "virtual" allí en su Roca que tanto quieren, ¡que ya está bien!

Hagamos un aeropuerto en la zona en condiciones, hagamos zona franca en La Línea y Algeciras, demos las mismas o mejores ventajas fiscales a quienes se instalen allí y practiquen negocios financieros e inversiones legítimas para acabar con el chollo que tienen estos impertinentes maleducados. El Reino de España ofrece una seguridad jurídica al formar parte de la Comunidad Europea que legitimiza muchas de las medidas que se deberían y podrían tomar, que en su día se hicieron pero no tenían la legitimidad, ni la eficacia que hoy en día tendrían si se aplicaran con vigor y con continuidad.

Mano dura pero hablando, impuestos sonriendo, controles pero explicando los males de la droga, la inmigración clandestina, etc., y veremos quién habla de "lenguaje emocional" y de impertinencias, señor Caruana. ¡Ah! Y si viene usted a jugar al golf, puede que le salga mejor irse a jugar a Escocia, ¡tardará usted menos!, aunque, quizá, le llueva.

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