El juez admite a trámite 3.000 denuncias contra la obra 'Me cago en Dios'
Un juez ha admitido a trámite 3.000 denuncias contra Íñigo Ramírez de Haro, autor de la polémica obra Me cago en Dios, que se representó en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y posteriormente en el teatro Alfil, según Víctor Lozano, portavoz del Centro Jurídico Tomás Moro (CJTM), que difundió un modelo de denuncia a través de la plataforma tecnológica www.hazteoir.org. Este grupo ha presentado una querella criminal para ejercer la acusación en el procedimiento penal.
Inicialmente, el juez archivó las denuncias, pero el fiscal interpuso recurso de reforma y finalmente las 3.000 denuncias han sido admitidas a trámite, mediante auto de 31 de mayo, incorporándolas a las querellas criminales presentadas, aseguró Lozano.
Asimismo, el juez ha citado a declarar el 22 de junio en calidad de imputado a Ramírez de Haro, por la presunta infracción de los artículos 510 y 525 del Código Penal, que establecen penas de hasta tres años de prisión para quienes provoquen al odio o a la discriminación por motivos religiosos y para quienes hagan escarnio de las creencias religiosas.
Caída del cartel
La polémica representación de la obra de Ramírez de Haro, cuñado de la presidenta del Gobierno regional, Esperanza Aguirre, se cayó de la cartelera del teatro Alfil una semana antes de lo previsto. La última función estaba programada para el 6 de junio.
La falta de rentabilidad -sólo se ha cubierto el aforo en un 8%- y los elevados gastos de seguridad han obligado a la productora y al director del Alfil a adelantar su salida.
Personas contrarias a esta obra se manifestaron ante el teatro e hicieron que los propietarios tuvieran que contratar a vigilantes de seguridad. Casi un centenar de ultraderechistas se concentraron a las puertas del local en las fechas inmediatamente anteriores a la retirada.
El artículo 525 del Código Penal señala que "incurrirán en la pena de multa de 8 a 12 meses los que, para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa, hagan públicamente, de palabra, por escrito o mediante cualquier tipo de documento, escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen, también públicamente, a quienes los profesan o practican".
Dos nietos del antiguo líder ultraderechista Blas Piñar, de 21 y 24 años, respectivamente, interrumpieron a principios del pasado mayo la representación de Me cago en Dios en el Círculo de Bellas Artes, patearon al actor Fernando Incera; agredieron a Íñigo Ramírez de Haro, y destrozaron el equipo de sonido de la sala y trataron de incendiar el decorado al grito de "¡Viva Cristo Rey!" y "blasfemos".
