Bilbao estrena hoy circunvalación con el cierre del corredor del Txorierri
La Diputación de Vizcaya inaugurará hoy lunes su carretera más costosa hasta ahora, la segunda fase del corredor del Txorierri, que ha requerido una inversión de más de 96 millones de euros. La autovía tiene una importancia especial porque cerrará un gran anillo de circunvalación de casi 35 kilómetros en torno a Bilbao y es la esperanza de las autoridades para aliviar algo la saturada autopista A-8. Como en todas las grandes obras, ha sufrido retrasos, entre ellos por la presión de los ecologistas para respetar dos puentes del siglo XVI. Se calcula que circularán a diario unos 40.000 vehículos.
Esta carretera fue el proyecto más mimado por el anterior diputado vizcaíno de Obras y Transportes, el peneuvista José Félix Basozabal, que nada más acceder al cargo en 1995 se afanó en impulsar su ejecución. Para 1997 ya tuvo un proyecto de construcción pero no quedó aprobado hasta 2000, lo que frustró la intención inicial de empezar las obras a finales de 1999.
La razón principal fue la modificación del trazado previsto por un fallo administrativo y para salvar dos puentes del siglo XVI y una calzada descubiertos en la línea del recorrido diseñado, después de la presión ejercida por colectivos ecologistas. La Diputación creará un itinerario peatonal de 1,6 kilómetros para disfrutar de estos elementos que se pretendía inaugurar al mismo tiempo que el vial. Sin embargo, tras iniciarse las obras el pasado octubre, ahora se prevé su conclusión para marzo de 2004.
Vital importancia
La autovía que se abre hoy, de 9,5 kilómetros, es la continuación del trazado entre Erandio y Derio, inaugurado en 1994 y que costó más de 45 millones de euros. Ahora se ha prolongado el corredor desde Derio a Galdakao, donde conecta con la A-8 en el barrio de Erletxes. Su construcción se ha abordado en dos tramos y el de menor longitud, entre Erletxes y Larrabetzu, se abrió el pasado 30 de abril.
La segunda fase del corredor del Txorierri está considerada por las autoridades de vital importancia. Además de ofrecer otro acceso a Bilbao y a la transitada zona del Parque Tecnológico de Zamudio, cierra por vez primera un anillo de circunvalación en torno a la capital vizcaína: por el norte con este vial y por el sur con la A-8. Son casi 35 kilómetros que permiten una alternativa para el acceso al área metropolitana a través de la saturada autopista, que la pasada semana ya sufrió dos grandes atascos y padece retenciones cada vez que ocurre un accidente leve.
La Diputación vizcaína recalca que esta autovía permitirá que los viajes procedentes de Amorebieta, Durango, San Sebastián o Francia y con destino a las dos márgenes de la ría y Cantabria "no atraviesen los túneles de Malmasín ni la Solución Sur". Además, facilitará el desarrollo socioeconómico de esta parte del valle del Txorierri y que los municipios de Derio, Zamudio, Lezama y Larrabetzu se incorporen al área metropolitana.
La magnitud de este proyecto se evidencia en las más de 107 hectáreas expropiadas, la mayor ejecutada en el territorio vizcaíno. Se han tenido que derribar seis caseríos y un chalet, cuatro de ellos habitados. El coste de las expropiaciones superará los 9 millones de euros y se han abierto un total de 341 expedientes, aunque todavía no se han cerrado todos.
Pese a que la carretera se inaugura hoy, los trabajos en la zona proseguirán con el fin de facilitar una conexión directa con el corredor desde el Parque Tecnológico de Zamudio. Con el proyecto actual, los usuarios de esta zona industrial tienen que atravesar el municipio de Zamudio para incorporarse a la nueva autovía. La Diputación, que inició a mediados de septiembre las obras, espera concluir para octubre de 2004 la construcción de un paso subterráneo, que atraviesa la línea del ferrocarril, desde el Parque Tecnológico al corredor. La inversión consignada es de casi cinco millones de euros.
Otra mejora
Junto a ello, se trabaja en otra mejora al proyecto: la conexión directa del corredor con la A-8 para los vehículos procedentes del valle del Txorierri. Estos trabajos, con un coste de casi tres millones de euros, empezaron en agosto y se pretende concluirlos para el mismo mes del próximo año.
Pero el corredor del Txorierri, que hace un lustro se veía como la solución a los continuos atascos en los accesos a Bilbao, no es suficiente, según las autoridades vizcaínas, que ultiman otro gran proyecto. La Diputación definirá estos meses el trazado de la denominada Supersur, una autovía de peaje de 14 kilómetros entre las localidades de Arrigorriaga y Trapagaran, que discurriría paralela a la A-8.
