Rabih Alameddine traza con humor e ironía la vida de una mestiza libanesa

Humor, sentimientos y mezcla de culturas se entrecruzan en Yo, la divina (Seix Barral), de Rabih Alameddine, nacido en Jordania en 1959 y nacionalizado libanés. El libro está concebido como una colección de retazos que permite ir conociendo la vida de Sarah Nour el Din, la protagonista de la novela, una mujer educada en una familia mestiza que finalmente encuentra la paz en su exilio en Estados Unidos. Sarah Nour el Din es hija de madre norteamericana y padre libanés, educada en una familia marcada por un divorcio, una segunda boda y un Beirut en guerra.

Rabih Alameddine explica que la forma de escritura fue lo primero que surgió y después nació la historia. "Simplemente, lo que he hecho es utilizar una estructura no lineal, sino fragmentaria. Creo que se piensa por impulsos y no se puede ver el mundo como algo que va del punto A al punto B. La televisión nos bombardea constantemente con imágenes que no tienen un orden lineal".

El autor se planteó escribir sobre un personaje y éste fue Sarah. "La historia de la gente se va haciendo de piezas desordenadas. Cuando decidí que la forma iba a ser con primeros capítulos, la historia cayó dentro de la forma, se volcó dentro. La siguiente decisión fue quién pensaría de esa manera, y es como Sarah nace, porque tenía la capacidad de ser inasequible al desaliento".

Alameddine considera que la elección de elaborar primeros capítulos fue un desafío, "y algo excepcionalmente bueno es que no me he aburrido". "Hay escritores que no consiguen acabar una novela, y es porque ellos mismos se aburren. Para mí, es interesante trabajar en las novelas, marcarse los límites, los desafíos, eso me retrotrae a los días de mi época de pintor en la que me ponía límites para superarlos".

En Yo, la divina, se va descubriendo parte de la vida del escritor. "No soy una mujer, pero Sarah tiene muchos aspectos que pertenecen a mi vida. Le gustan muchas cosas igual que a mí: juega al fútbol, pinta, fue a la misma escuela que yo y sus sentimientos de alienación son muy parecidos. Esa mezcla entre el mundo occidental y el árabe me resulta muy próxima. No estoy tan chiflado como ella. Hay grandes diferencias y a veces tengo que decir que no soy una mujer. En ella hay muchos proyectos que no terminan y yo en cambio he logrado acabar mi libro".

La protagonista está inspirada en dos personajes reales, en una prima del autor y su amiga; una quería pasar inadvertida y la otra siempre buscaba ser el centro de atención, con ropas ajustadas, en la escuela secundaria.

El escritor enmarca sus personajes durante la guerra de Líbano. "Esa dolorosa confusión que vive el libanés, que vive Líbano como país, ha hecho de sus habitantes una gran comunidad emigrante. Ser libanés le complica a uno encajar en Líbano. Eso es muy duro y Sarah sería la representante humana de Líbano".

Rabih Alameddine, graduado en Ingeniería por la Universidad de California, ha trabajado de consultor, camarero, profesor, pintor y escultor antes de publicar Koolaids: el arte y la guerra y The Perv. "Quería ser escritor desde los cuatro años, aunque hice de todo para retrasar el momento de empezar a escribir. Por eso, antes me dediqué a leer mucho". El autor logra encajar en la historia la comedia y la tragedia con habilidad y sorprende al lector cuando menos se lo espera. "Soy un cabrón. Ha sido un juego con el que me lo he pasado bien", sentencia.