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Reportaje:RUTAS URBANAS

A un paso del diván de Freud

La casa londinense del padre del psicoanálisis esconde un tesoro

Andrés Fernández Rubio

Suena la alarma. Un turista ha saltado el cordón protector para ser fotografiado más cerca del diván, ese mueble simbólico y universal, cubierto por una alfombra iraní en tonos rojos y azules (el cuñado de Freud era importador de alfombras y en el estudio hay algunas espléndida

s, en especial una pieza turcomana de la zona del Caspio). El vigilante llama la atención al culpable, pero sin acritud: no será el último que sienta el impulso transgresor de aproximarse, tocar, fotografiarse, conectar con la atmósfera que allí se respira.

Sigmund Freud practicó el psicoanálisis los últimos meses de su vida en el 20 de Maresfield Gardens -"espero que nuestra última dirección en este planeta", escribió-. Se mudó el 27 de septiembre de 1938 (había llegado en junio tras una huida de Viena a Estrasburgo, París y Londres), y vivió allí hasta su fallecimiento, a los 83 años, el 23 de septiembre de 1939. Logró que sus pertenencias fueran enviadas desde la mítica dirección de Viena: Berggasse, 19. Ahora la sala de esta casa londinense de ladrillo se mantiene en penumbra, con las cortinas echadas, a fin de que la luz natural no dañe el mobiliario y para lograr un efecto escenográfico perturbador: el diván iluminado como un santo grial. En realidad, Freud atendía a sus pacientes con las cortinas abiertas, mientras la luz traspasaba desde el jardín los grandes ventanales. Detrás del cabecero del diván se encuentra la butaca verde de respaldo cóncavo en la que Freud se sentaba y escuchaba sin ser visto -"no puedo permitirme que me miren ocho horas al día", le dijo a un amigo.

Narcisismo y ansiedad

No llegan a diez los visitantes de la casa este mediodía. Una familia alemana con niños, una psicóloga venezolana, una pareja de estudiantes centroeuropeos, un terapeuta brasileño... Han venido desorientados, buscando la dirección por las calles adyacentes; aprovechando el paseo para disfrutar de un día de sol en Hampstead, un barrio encantador; preguntando a los transeúntes y animados por su secreta búsqueda. El resultado de ese viaje enlaza con aspectos fundamentales de la cultura del siglo XX. En los títulos de los volúmenes que se venden en la librería aparecen palabras como libido, histeria, asociación libre, culpa, ansiedad, castración, depresión, complejo de Edipo, narcisismo, inconsciente.

Los visitantes recorren despacio las habitaciones: el piso de arriba, con el estudio de la hija, Anna Freud, que vivió aquí hasta su muerte, en 1982. También la sala de vídeo, con una grabación en la que aparecen personajes clave en el entramado teórico y vital de Freud. Luego los visitantes bajan y contemplan los retratos de Freud a lápiz de Ferdinand Schmutzer y Salvador Dalí. Echan de nuevo un vistazo a la sala donde está el diván, su escritorio y la silla cuyo extraño respaldo diseñó en 1930 el arquitecto Felix Augenfeld; la colección de objetos y antigüedades (figuras egipcias, algunas de ellas falsas; vasijas griegas, terracotas chinas, amuletos, budas...); fotografías (el templo faraónico de Abu Simbel, el Edipo de Ingres, la litografía de André Brouillet Una sesión clínica en la Salpêtrière); libros (Shakespeare, Goethe...).

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Y junto a la puerta, la Gradiva (la que avanza). Esta copia del bajorrelieve romano que muestra a una joven caminando recuerda el célebre estudio de Freud sobre la novela corta de Wilhelm Jensen Gradiva: una fantasía pompeyana. Es en este ensayo donde Freud sostiene que todos los poetas dignos de tal nombre "han considerado como su misión verdadera la descripción de la vida psíquica de los hombres, llegando a ser, no pocas veces, precursores de la ciencia psicológica".

En 1891, una paciente agradecida, la señora Benvenisti, le regaló a Sigmund Freud el famoso diván.
En 1891, una paciente agradecida, la señora Benvenisti, le regaló a Sigmund Freud el famoso diván.FREUD MUSEUM LONDON

GUÍA PRÁCTICA

La visita

- Museo Freud. 20, Maresfield Gardens. Londres NW3 5 SX. Teléfono: 00 44 207 435 2002. Horario de visitas: miércoles a domingo, de doce de la mañana a cinco de la tarde. Precio: 5 libras (7,12 euros). Estación de metro más próxima: Finchley Road. Otra posibilidad

es bajarse en la más lejana estación de metro, West Hampstead, e ir caminando por esta animada zona de restaurantes y cafés al aire libre. E-mail: freud@gn.apc.org. Página web: www.freud.org.uk.

- Bibliografía. 20 Maresfield Gardens, a guide to the Freud Museum. 15 libras (21,36 euros).

Se vende en la librería del museo.

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