Navarra aprueba la financiación pública de los tratamientos para dejar de fumar
Los médicos del sistema público recetarán parches de nicotina y pastillas de bupropión
Navarra será la primera comunidad autónoma que pagará los tratamientos para dejar de fumar como si fueran medicamentos cubiertos por la Seguridad Social. El Gobierno navarro, de UPN, aprobó ayer un decreto por el que los médicos del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS) recetarán tanto los parches de nicotina como las pastillas tipo Zyntabac (con el bupropion como principio activo) a sus pacientes. Como con cualquier medicamento cubierto, la financiación será del 60% del precio para los trabajadores y hasta el 100% para los pensionistas.
Navarra financiaba hasta la fecha un tercio del coste de adquisición de los parches transdérmicos de nicotina, lo que venía a suponer a las arcas de la Hacienda Foral aproximadamente 60 euros por paciente. Más de 450 personas se acogieron en 2002 a las ayudas económicas para dejar de fumar en una comunidad que tiene 560.000 habitantes.
Desde ahora, según el acuerdo adoptado ayer por el Gobierno foral, financiará con cargo a sus recursos propios el coste (total o parcial) de esa misma terapia para el abandono del hábito tabáquico, o bien de la prescripción de los medicamentos que llevan el bupropión como principio activo, como el Zyntabac.
A diferencia de los parches, que suministran nicotina a través de la piel, el bupropión no contiene esa droga, sino que reduce la ansiedad de fumar y, por tanto, ayuda a dejar el hábito a las personas motivadas para hacerlo. Sólo se administra por prescripción médica, ya que está contraindicado en algunos pacientes.
Los navarros con tarjeta sanitaria a cargo del SNS podrán así recibir del médico que atiende su proceso de deshabituación la receta oficial gracias a la cual sólo abonarán el 40% del coste real de la medicación que se les prescriba. Esa financiación pública será del 100% en el caso de ser jubilado o pensionista.
La simplificación de los trámites (se podrán realizar en cualquier centro de salud de Navarra) permitirá aumentar el número de personas que demanden el tratamiento y las nuevas ayudas para abandonar el tabaco, según indicaron fuentes del programa. La extensión de la financiación pública es un paso más de la lucha contra el tabaco impulsada por el departamento de Salud que ha dirigido en esta recién finalizada legislatura el consejero regionalista Santiago Cervera.
El consejero, que no repetirá en el cargo, fue el propulsor de la restrictiva ley foral de prevención, promoción y protección de la salud en relación con el tabaco aprobada en 2002 por el Parlamento de Navarra. El proyecto establecía, entre otras, la prohibición de fumar en espacios laborales cerrados con dos o más trabajadores. La fuerte oposición empresarial a la ley generó una dura renegociación con el Ejecutivo, y finalmente una moratoria de dos años para su aplicación en el ámbito laboral. La ley elevó de 16 a 18 años la edad mínima para adquirir tabaco, prohibió todo tipo de patrocinio y comunicación comercial a las tabacaleras y extendió la prohibición de fumar a diversos espacios públicos y privados.
El decreto foral aprobado ayer prevé que la relación de medicamentos y terapias subvencionables se pueda ampliar conforme a las nuevas evidencias científicas. El consejo de dirección del Plan Foral de Acción sobre el Tabaco sería el encargado de aprobar la financiación para otros nuevos fármacos. De momento, el departamento de Salud dispone de una partida ampliable dotada con 50.000 euros para atender los nuevos márgenes de financiación.
Las campañas derivadas de la ley foral de Acción sobre el Tabaco han sido intensas. Muchas de ellas se han dirigido al público más joven que empieza a fumar. Una reciente encuesta de la Fundación Bartolomé de Carranza constató que, por primera vez desde 1982, son más los jóvenes navarros de entre 15 y 29 años que no fuman que los que sí lo hacen. El 51% no fuma nunca, el 33,8% lo hace asiduamente y el 15,1% fuma de manera esporádica. Dos de cada cinco jóvenes consultados señalaron que deseaban dejar de fumar. En España el tabaco causa 55.000 muertes al año, según el Ministerio de Sanidad.
También ayer, el comisario europeo de Sanidad, David Byrne, y un representante de la presidencia griega del Consejo de la UE suscribieron en Ginebra la convención marco contra el tabaco acordada el pasado 21 de mayo en el seno de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que prohíbe la publicidad de cigarrillos.
