Los tres tenores
Zapatero, Pla y Rubio. Tres noveles en la plaza de toros de Valencia llenaron el coso hasta la bandera. Tres nuevos tenores que no defraudaron al auditorio. Valencia volvió a ser una fiesta socialista, que empezó con retraso porque controles gubernativos en la autopista demoraron a varios autobuses de las comarcas del sur. Buscarían a peligrosos terroristas, es un suponer.
Con sorprendente soltura y fluidez para ser su primera tarde de gloria ante 25.000 personas, los candidatos desgranaron implacables sus críticas al PP y sus propuestas ilusionantes a la ciudadanía. Retengo la reivindicación de una sociedad y una acción política basadas en valores, principios y ética. Asumo y tomo buena nota, como todos los ciudadanos y militantes, de la reivindicación de Pla y Rubio ante Zapatero de las necesidades y exigencias de este paciente pueblo valenciano. Por encima de las siglas partidarias, se llegó a decir.
Zapatero se comprometió a traer el agua que necesitamos y que nunca vendrá con el plan de confrontación del PP. Y el AVE, rápido y efectivo, no el tren de cercanías que pactó Zaplana. Y ante los graves problemas: inseguridad ciudadana -un fracaso acreditado de Camps- empleo precario, ciudadanos que necesitan 10 años de su salario para acceder a una vivienda, destacaron Pla y Zapatero a nuestro mayor experto en viviendas sociales: Zaplana y su piso de 500 millones. Para desgracia de Camps la sombra de Zaplana no sólo es alargada sino espesa, viscosa. Tal que el chapapote, vamos.
Segundo Bru es portavoz del PSOE en las comisiones de Economía y Presupuestos del Senado