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El PP evitará que su convención sea un debate entre sucesores

El vicepresidente Rodrigo Rato no intervendrá como ponente

Luis R. Aizpeolea

El PP pretende evitar que la convención que celebrará este fin de semana se convierta en un debate entre los tres principales candidatos a la sucesión de José María Aznar. Finalmente, el vicepresidente segundo, Rodrigo Rato, no intervendrá, aunque la dirección del PP aclaró que es "porque no lo ha querido". Jaime Mayor presentará el programa electoral, y Mariano Rajoy lo hará con una ponencia sobre el Prestige.

El secretario de Organización del PP, Pío García Escudero, aclaró ayer que la convención -cuyo lema es El compromiso de centro; más cerca de tí- no tendrá las características de un Congreso, con debates, votaciones y elección de cargos. Su pretensión es presentar el programa electoral autonómico y municipal del PP así como unas resoluciones sobre asuntos de actualidad que no tendrán carácter vinculante. "El debate ya se ha producido previamente", dijo ayer García Escudero a este periódico. También anunció que el PP celebrará convenciones en lo sucesivo con una periodicidad anual.

Recordó que inicialmente la dirección del PP sólo había previsto la intervención de Jaime Mayor en su calidad de coordinador del programa electoral. La decisión sobre la intervención de Rajoy la adoptó sobre la marcha al colocarse la catástrofe originada por el Prestige en el centro de la actualidad, por su importancia y consecuencias, y la elección del ponente recayó en el vicepresidente primero del Gobierno por su papel como coordinador de la crisis. "Que hable uno o incluso dos no tiene por qué presuponer que tengan que intervenir los tres vicesecretarios del partido", dijo García Escudero.

Un compromisario más

Rato, que acudirá como un compromisario más a la convención, pidió expresamente a la dirección del PP que le eximiera de intervenir. Rajoy también manifestó la misma voluntad previamente, pero el propio José María Aznar le pidió que se hiciera cargo de la resolución sobre la catástrofe del Prestige. Y fue el propio Aznar quien ayer, en una rueda de prensa en La Moncloa, acompañado del primer ministro de Túnez, Mohamed Ghannuci, volvió a reclamar que el debate sobre la sucesión se aleje en el horizonte político del PP. Todas estas cautelas de la dirección del PP se explican por su intención de desvanecer de forma definitiva la interpretación inicial de que la convención iba a servir para que los tres principales candidatos a la sucesión de Aznar debatieran, por vez primera, sobre la idoneidad de sus propuestas.

Además del programa electoral, cuya presentación correrá a cargo de Mayor Oreja y sobre cuyo contenido social puso ayer el acento García Escudero, otros intervenientes desarrollarán sus aspectos más relevantes. El candidato a la alcaldía de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, disertará sobre las grandes ciudades; el candidato a la presidencia de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, lo hará sobre seguridad; el de Castilla-La Mancha, Adolfo Suárez Illana, sobre el desarrollo rural; la de la comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sobre asuntos sociales; el de Asturias, Ovidio Sánchez, sobre la segunda descentralización, y la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, sobre inmigración.

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Algunos dirigentes del PP presentarán resoluciones sobre asuntos de actualidad. Además de Mariano Rajoy, que abordará la crisis del Prestige, María San Gil, candidata a la alcaldía de San Sebastián, disertará sobre la democracia local en el País Vasco; el ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, sobre la vivienda; la vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio, abordará el futuro de la Unión Europea, y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo hará sobre el crecimiento económico.

La convención, según explicó ayer García Escudero, contará con casi 2.000 participantes: 562 corresponderán a la Junta Directiva Nacional; 481 serán parlamentarios autonómicos; 430 son alcaldes y portavoces de cabildos; 31 son presidentes y portavoces de diputaciones; 31 son portavoces en capitales de provincia no gobernadas por el PP; 50 corresponden a Nuevas Generaciones, las juventudes del PP, y 345 han sido designados por las organizaciones territoriales del partido en España. La convención la clausurará José María Aznar el domingo.

Jaime Mayor y Javier Arenas, ayer, durante el acto celebrado por el PP en Vitoria.
Jaime Mayor y Javier Arenas, ayer, durante el acto celebrado por el PP en Vitoria.EFE

"Respeto a los plazos"

El presidente del Gobierno, José María Aznar, manifestó ayer que respetaba las declaraciones del vicepresidente segundo, Rodrigo Rato, en las que se ofrecía como candidato a sucederle en el cargo, pero también reclamó que se le respete el plazo y los tiempos marcados para despejar esta incógnita. "Yo respeto mucho lo que dicen los demás, pero insisto en la normalidad total y en que los procedimientos, los plazos y los tiempos van a ser respetados. Ésa es mi idea y eso es lo que yo haré", dijo ayer en una rueda de prensa en La Moncloa, acompañado del primer ministro de Túnez, Mohamed Ghannuchi.Aznar no quiso responder a la pregunta de si Rato le había consultado previamente sus polémicas declaraciones. "A esa cuestión evidentemente no la voy a contestar".

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