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Columna
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25 años de CDTI

Diseñado por el afamado Massachusetts Institute of Technology (MIT) de Boston, se cumple por estas fechas el 25 aniversario de la creación por el Gobierno español, del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Hoy el CDTI, mediante la iniciativa Neotec, pretende contribuir a la creación y consolidación de empresas tecnológicas, financiando las denominadas NEBT. El desarrollo de las NEBT es más largo y tiene mayor riesgo que el de otras empresas. A ello cabe añadir además, problemas en el momento de aportar garantías y en ocasiones un inconveniente adicional por las dificultades propias de las entidades financieras a la hora de analizar los proyectos tecnológicos. La citada iniciativa tiene tres fases. La primera debe tener lugar en las universidades, centros de investigación, centros científicos, e institutos tecnológicos o similares, en los cuales se asiste al emprendedor, investigador o tecnólogo. En la segunda se le apoya mediante créditos que financian la puesta en marcha de la empresa. En la tercera se da un estímulo a las empresas de capital-riesgo, tales como Invertec, Talde, Najeti España, o BCN Empresa, escasamente implantadas en la economía valenciana, para que tomen participaciones en los proyectos, ofreciéndoles préstamos en condiciones beneficiosas, y comprometiendo asimismo la presencia del CDTI. El fomento de la innovación para las empresas valencianas de base tecnológica se realiza normalmente a través de los centros de servicios a empresas, contando con los institutos tecnológicos; los centros europeos de empresas e innovación, que apoyan la creación de nuevas empresas o líneas de actuación innovadora; y los puntos de encuentro denominados proxi que constituyen una red de proximidad para conocer las necesidades de las empresas, mejorar su competitividad y animar su incorporación a las tecnologías de la información.

Las empresas de capital-riesgo son un instrumento poco utilizado en el caso valenciano por la política de gestión de la innovación, que requiere para ser contemplada en su globalidad, el paso previo de la generalización de la cultura del emprendedor, la formación de investigadores y tecnólogos, la gestión avanzada de las empresas, pero también la financiación de la innovación. Así recientemente ha tenido lugar en Cataluña un seminario auspiciado por el CDTI y organizado por el Centre d'Investigació i Desenvolupament Empresarial, en el que ha participado la generalidad de las empresas capital-riesgo, sobre las que en gran medida está basada la iniciativa Neotec con el fin de intercambiar experiencias. La metodología diseñada por el CDTI para esta iniciativa ha sido desarrollada en diferentes países lo que permite comparaciones por sectores para distintas tecnologías. El objetivo es crear una red, complemento del trabajo que realizan las entidades que ya trabajan en este ámbito, con el fin de buscar un efecto sinérgico. El problema ha sido para las empresas valencianas que tras 25 años de funcionamiento del CDTI, el escaso desarrollo de las empresas de capital-riesgo en nuestra economía, y la lejanía a los centros de decisión de los proyectos científicos o tecnológicos de nuestras NEBT, ha hecho que ninguno de ellos haya sido incluido entre los aprobados por dicha iniciativa, mientras lo han sido 11 en Cataluña, 6 en Madrid, 3 en Andalucía, 2 en el País Vasco, y uno en cada caso, en Baleares, Canarias y Navarra.

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