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Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

La edad pasa factura

La población española ha perdido dos millones de menores de 16 años desde 1991. Este vertiginoso descenso, como revelan los datos del censo de 2001, recientemente difundidos, ha coincidido en el tiempo con un infatigable aumento de la población mayor de 65 años, que ya supone el 17% del censo y que, por primera vez, supera al segmento más joven (15%). El resultado, debido tanto al descenso de natalidad como al aumento de la esperanza de vida, implica un cambio profundo en la base de la pirámide poblacional.

Esperar que la afluencia de inmigrantes ponga fin a los desequilibrios que genera el fenómeno del envejecimiento carece de sentido, entre otros motivos porque este colectivo también envejece. Más prudente parece buscar las soluciones en la administración eficiente de los recursos propios. Éste es el caso del gasto farmacéutico, una partida que ya generan en un 72% los pensionistas (grupo formado abrumadoramente por mayores de 65 años) y que este año alcanzará la cifra récord de 9.000 millones de euros.

Los sucesivos tratamientos de choque diseñados por el Ministerio de Sanidad no han obtenido el éxito esperado. El medicamentazo, los precios máximos subvencionados o el mismo pacto con la industria a duras penas han conseguido mantener por debajo del 10% su aumento anual.

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Posiblemente el error radique en que las medidas adoptadas, sin ser negativas, buscaban únicamente recortar el problema admitiendo resignadamente su crecimiento, en vez de reducirlo en su origen; por ejemplo, mediante la implantación real de los genéricos o a través del desarrollo de un sistema de evaluación de los medicamentos que supedite su financiación pública no tanto a su novedad como a su eficacia real. Son recetas ya contrastadas en otros países de la UE con resultados conocidos. Bien valdría apostar por ellas para afrontar una situación cuyo punto de partida, el cambio del eje demográfico, exige respuestas nuevas.

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