"Andrés Segovia le dio a la guitarra categoría de gran instrumento"
Francisco Cuenca es uno de los guitarristas andaluces que mejor sigue la estela del maestro Andrés Segovia. Dirige el Conservatorio de Música de Linares y él fue uno de los impulsores del Encuentro Internacional de Guitarra que lleva el nombre del linarense más universal. Francisco, que actúa como coordinador del Encuentro clausurado el último fin de semana en Linares, forma, junto a su hermano José Manuel, un prestigioso dúo de guitarra y piano, que han ofrecido más de 70 conciertos en países como Alemania, Suiza, Japón, Cuba, Reino Unido, Polonia o Estados Unidos, donde preparan para el mes de enero su vuelta al prestigioso Carnegie Hall neoyorkino.
Cuenca, natural de la localidad cordobesa de Puente Genil, asegura que el Encuentro Andrés Segovia, que cada año reúne en Linares a los mejores intérpretes de guitarra española, pretende, por un lado, homenajear al gran músico linarense y, de otro, la promoción de los nuevos valores de la guitarra y de las jóvenes promesas.
Cree incluso que la obra de Segovia tiene plena vigencia 15 años después de su muerte. "Su obra es una referencia de primer orden para todos los investigadores de la guitarra. Segovia hizo una aportación inmensa, no sólo desde el punto de vista social dándole a la guitarra categoría de gran instrumento, sino que también realizó un sinfín de transcripciones para otros instrumentos e hizo que autores internacionales escribieran para la guitarra. Podemos decir, por tanto, que la obra de Segovia es una fuente inagotable", asegura.
El Encuentro de Guitarra no sólo se encuentra consolidado 11 años después, sino que su nivel ha ido creciendo paulatinamente. En el ciclo de conciertos programado este año han destacado el argentino Ernesto Bitetti, el británico David Rusell o el turco Ahmet Kanneci, sin olvidar al español Javier García. El Concurso lo ha ganado el guitarrista sevillano Miguel Arriaga, que se garantiza una serie de conciertos por varios países del mundo.
También destacable es la proyección que la guitarra española ha alcanzado en Japón, algo que Francisco Cuenca atribuye a la "gran labor" que Andrés Segovia realizó en ese país, donde recibió la más alta distinción que concede el monarca japonés, como es la medalla del Sol Naciente. "En Japón hay un amor impresionante por la guitarra y por lo español, tanto en lo clásico como en lo folclórico. De hecho en Kyosato está consolidado desde hace años el Festival Internacional de Música Española", recuerda Cuenca.
Los estudios de guitarra española se están potenciando mucho en los Conservatorios de Música, sobre todo en los 70 que hay en Andalucía. Francisco Cuenca cree, no obstante, que habría que aspirar al reconocimiento de un título reglado para los guitarristas.
