Contra la figura de un presidente de Europa

Wilfried Martens, presidente del Partido Popular Europeo (PPE), y el eurodiputado alemán Elmar Brok son dos de los líderes conservadores europeos más entusiastas del modelo federal para Europa. Por eso no resistieron la tentación de introducir en el borrador de Constitución Europea una bomba de profundidad contra la tesis defendida por quienes se oponen a la fórmula federal, entre ellos José María Aznar, para que en el futuro se cree la figura de un presidente del Consejo de la UE que permanezca en ese puesto varios años.

En el Congreso del PPE de Estoril, y precisamente debido a la cerrada oposición alemana a esa tesis, los delegados se limitaron a dejar abierta esa posibilidad de crear la figura del presidente, pero sin aludir explícitamente a ella. En el texto presentado ayer, por el contrario, se indica en el artículo 75 que la presidencia de la UE seguirá siendo ejercida por turno cada semestre, como ahora, por cada uno de los líderes europeos. Y añade: 'El Consejo puede decidir por unanimidad un periodo más amplio'.

'No queremos un poder ejecutivo bicéfalo', advirtió ayer Martens a quienes desean compatibilizar al presidente de la UE y al de la Comisión Europea. 'Sólo hay un presidente ejecutivo, y es el de la Comisión', agregó Brok.

Es ese punto, precisamente, el que más enervó a los eurodiputados españoles del PP miembros de la Convención. El propio líder de los parlamentarios europeos del PP, Gerardo Galeote, declaró que el documento presentado ayer 'contradice' alguna de las conclusiones de Estoril.

Aznar, junto al francés Jacques Chirac y al británico Tony Blair, es uno de los firmes defensores de la figura de un presidente de la UE, cargo al que el propio presidente español aspiraría tras dejar el Gobierno, según han insinuado en numerosas ocasiones tanto políticos españoles como de otras nacionalidades.