_
_
_
_
_
Entrevista:JOSÉ MARÍA ABREGO | Rector de la Universidad de Deusto | UNIVERSIDAD

'La 'marca' Deusto sigue vendiendo, pero muy poco'

José María Abrego (Pamplona, 1945) es jesuita, profesor de la Facultad de Teología de la Universidad de Deusto y, desde hace siete años, su rector. Aficionado al tabaco de pipa y a la ópera, analiza con una, en ocasiones, desconcertante sinceridad una institución centenaria sobre la que pululan gran cantidad de tópicos y muchos de ellos falsos. 'La marca Deusto sigue vendiendo, pero muy poco', advierte.

Pregunta. Usted ha reclamado que la nueva ley vasca de universidades contemple ayudas a los centros privados. ¿Eso no supondría jugar con ventaja frente a la pública?

Respuesta. No sé quién juega con ventaja. El problema es cómo organizamos el sistema universitario. No digo que den dinero, sino que si la sociedad está dispuesta a pensar, con los recursos que tiene, cómo quiere que se formen sus universitarios, que lo haga, pero que se controle. Que se vea qué posibilidades hay de que los ciudadanos no se vean discriminados por optar por un sistema o por otro, uno en el que la matrícula es casi gratuita y otro en el que se debe pagar la matrícula completa. No pido ayudas para las instituciones, yo digo que se piense en los ciudadanos.

'El aumento de la UPV no me preocupa, me preocupa que no lo tuviéramos nosotros'
'Deusto tiene fama de elitista porque cobra. A mí me encantaría no cobrar'

P. ¿Pero eso no supondría en su caso un excesivo dirigismo desde la administración pública?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

R. El peligro que tenemos es que la administración pública, en vez de colaborar en promocionar lo que a la sociedad le parezca conveniente, se vuelva loca en administrar la universidad pública, y lo estoy diciendo por el Estado español. Para administrar la universidad están las autoridades académicas, pero para marcar los objetivos está la sociedad.

P. ¿Y eso cómo se plasmaría en el País Vasco?

R. Mi propuesta es un consejo de universidades en el que estén las universidades, la administración y la sociedad para decir cuáles son los objetivos para los próximos cinco años, que se establezcan programas marco, que se evalúen, que se promuevan y luego se vea si se han cumplido o no.

P. ¿No habría que comenzar primero por un mayor acercamiento entre las tres universidades vascas?

R. Tenemos muchos contactos, lo que pasa es que la discusión antigua de que lo importante era la titularidad, pública o privada, ha hecho pequeños estragos y no ha permitido muchos contactos. De todas formas, somos el único caso del mundo de una cátedra compartida por dos universidades de titularidad diversa (la cátedra de Genoma y Derecho, de la UPV y Deusto). Pero se podría hacer más y, de hecho, estamos en ello.

P. ¿La Universidad de Deusto necesita ayudas económicas?

R. Siempre serán bienvenidas. Todo el sistema universitario está cambiando en Europa, y fundamentalmente en el Estado español. Tenemos que preparar personas para cambiar, para innovar y esas personas deben sentir la necesidad de seguir aprendiendo. Hoy día, la universidad tiene que abrirse para colaborar más con el mundo de las empresas, a la formación continua, a las redes... Ya no se puede ser una universidad aislada. ¿Y toda esta transformación se puede hacer sólo con el dinero que obtenemos de los alumnos de la formación inicial? Pues no. ¿Necesitamos ayuda? Voto al chápiro. Y encima están disminuyendo los jóvenes de 18 a 23 años, y además no quiero que nos convirtamos en una universidad a la que sólo vengan los hijos de papá... ¿Necesitamos ayuda? Toda la que den será poca. Pero no sólo de las instituciones, también de las empresas...

P. Habla usted de la dependencia de las tasas de los alumnos. En el presente año académico, la matriculación de primer curso en la UPV ha subido un 10%. ¿Le preocupa?

R. El aumento en la UPV no me preocupa, me parece una buena cosa y les felicito. A mí me preocupa que no hayamos tenido ese incremento en Deusto.

P. ¿La UPV les está ganando terreno?

R. No tendría ningún inconveniente. Sospecho, sin embargo, que los terrenos son bien distintos. La UPV tiene que satisfacer las demandas de todos los ciudadanos. Nosotros hicimos hace unos años unas pruebas, y ahora digo gracias a Dios que no nos metimos en Medicina, pero la UPV tiene que tener éste y otros estudios con gastos muy elevados que otros no podemos asumir.

P. ¿La marca Deusto sigue vendiendo?

R. A juzgar por los resultados, sigue vendiendo, pero muy poco. Sin embargo, quien sabe manejar aspectos comerciales la utiliza, y no somos nosotros. Es el caso de la editorial. No hemos ido a juicio porque no hay nada que hacer. Eso sí, eran alumnos de Deusto.

P. ¿Una universidad puede vivir del prestigio atesorado?

R. Jamás. Nada, nada. Una universidad que haya atesorado prestigio tiene que correr mucho más para mantenerlo que otras para crearlo, pero mucho más. Éste es exactamente nuestro caso.

P. ¿Es Deusto una universidad elitista?

R. Para algunos, tiene fama de elitista porque cobra. Y yo digo, me encantaría no cobrar. Llevamos 26 años haciendo, con la matrícula, encuestas del origen social de los estudiantes de Deusto y esos datos nos dan exactamente los mismos resultados que una universidad de cualquier titularidad. Aquí nos hemos defendido porque había muchos profesores jesuitas que dejábamos casi todo el sueldo en fondos de bolsas, pero cada vez hay menos jesuitas y, por lo tanto, los fondos no abundan.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_