La tecnología de 'e-learning' avanza más deprisa que su mercado
La Unión Europea exige que en 2005 un 30% de los cursos subvencionados usen este método
Los desarrolladores de las plataformas de e-learning tienen también sus propias asignaturas que aprobar. La caída de la inversión en tecnología, entre otros factores, les obliga a posponer la esperada integración de sus productos de teleformación a través de la web con los portales de conocimiento corporativos. El e-learning avanzado es otro de los trenes tecnológicos que han madrugado demasiado. Ahora deberá detenerse algún tiempo.
Desde que emprendió su viaje, hace ya más de media docena de años, no ha ocultado que su destino era muy ambicioso. Transformar el aprendizaje humano de raíz, especialmente en el campo de la formación corporativa. Inicialmente, los desarrolladores de las grandes plataformas de e-learning prometían a las empresas ahorrar costes por desplazamiento, entre otros beneficios, pero su objetivo final consiste en mejorar la competitividad uniendo la formación de los empleados con los portales corporativos de conocimiento. Una partitura que sonaba bien a los responsables de recursos humanos de las compañías punteras pero que en la mayoría de empresas no se ha podido aún interpretar. En parte por las resistencias culturales y, también, por problemas de interoperabilidad y dificultades de integración de estas soluciones con los sistemas de gestión corporativos. La escasez de ancho de banda contribuía a su vez perjudicando a los recursos del e-learning para seguir las clases a distancia en directo. Pero el principal freno para la popularización del e-learning es la crisis económica, que obliga a los directivos a analizar con lupa las posibilidades reales de recuperar su inversión y la dificultad de invertir en el capital humano cuando se barajan despidos.
Predicciones fallidas
La crisis del mercado del e-learning llegó más tarde que la de otros segmentos de las tecnologías de la información, pero llegó. Gartner predijo hace un par de años que los 1,4 millardos de euros que el e-learning recaudó en 1999 ascenderían a 5,4 millardos en 2004. A principios de este año se vio que las previsiones no se iban a cumplir.
En España, aunque a menor escala, el frenazo económico también está afectando. 'Es un fenómeno muy relacionado con la burbuja de Internet', asegura Félix Navarro, de Genesys XXI, proveedor de servicios de e-learning con sede central en Albacete. Como respuesta, los fabricantes están cambiando su táctica. La necesidad de dar prioridad a la formación en las áreas críticas de la empresa, como recursos humanos y fuerza de ventas, impulsa el acercamiento del e-learning con el software CRM de firmas como Siebel y Oracle. O la compra de compañías especializadas por desarrolladores tradicionales de ERP, como la reciente adquisición de Teamscape por PeopleSoft.
Carmen Moneva, directora de Learning Services de IBM en España, explica que ha llegado la hora 'de reconducir la oferta a las necesidades actuales' centrándose en sistemas LMS (Learning Management Systems) más fragmentados, pero que pueden vencer la resistencia de los compradores.
Su compañía comercializa Sitea, una solución llave en mano para empresas con más de 100 empleados que incluye 39 cursos y aporta las ventajas del e-learning, como la gestión del alumnado, pero no obliga a trabajar conectada a un sistema ERP ni requiere contratar mantenimiento. Su configuración para 25 licencias cuesta 1.200 euros.
IBM también ofrece soluciones más económicas. Monieva y Navarro creen que otro filón de los sistemas LMS son los centros de formación, que ven cómo los cursos subvencionados son cada vez más cortos y necesitan amortizarlos con una tecnología que les reduzca costes. 'En cierta forma, el e-learning se va imponer en España por decretazo, ya que la Unión Europea exige que en el año 2005 un 30% de los cursos subvencionados utilicen e-learning', asegura Navarro. Su compañía comercializa Formateca, una solución para la formación continua en pequeñas y medianas compañías. 'Se paga sólo por lo que se consume', afirma. Desde el punto de vista tecnológico, el e-learning sigue en marcha.
La Universitat Oberta de Catalunya acaba de reescribir toda su plataforma de e-learning en Java. IBM está a punto de lanzar una nueva versión de su plataforma Lotus Learning Space. Un proceso gradual de madurez para este sistema de estudio que no debería alargarse más allá de los años 2004 o 2005. 'Es seguro es que la formación y la gestión del conocimiento acabarán por encontrarse', resume Moneva.
