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José María Aznar ha decidido aliviar la presión que sufre su Gobierno y tomar la iniciativa política, a menos de una semana del debate sobre el estado de la nación, con un cambio de ministros para encarar sus dos últimos años de mandato. En la crisis anunciada ayer, la mayor desde que en 1996 el PP llegó al poder, hubo sorpresas en los nombramientos, pero no en las destituciones.
Aznar tuvo tiempo de ir a un acto público mientras destituía a seis miembros del Ejecutivo, movía a tres y nombraba a cinco
José María Aznar hizo honor ayer a su fama y ejecutó en unas pocas horas con la máxima presteza y discreción la mayor crisis jamás planteada hasta ahora en su Gabinete. Por sorpresa, como hace siempre, y a contracorriente de los rumores que suelen acompañar a los analistas en los periodos preestivales.
La reunión prevista para el viernes entre Josep Piqué y su hasta ayer homólogo británico, Jack Straw, ya no tendrá lugar. El relevo del ministro de Exteriores en vísperas de una negociación sobre Gibraltar evidencia el bloqueo del proceso abierto hace un año, ya que el presidente José María Aznar ha considerado que no valía la pena posponer hasta después de esa cita el cambio del jefe de la diplomacia española.
El PSOE trató ayer de aparentar naturalidad ante la sorpresa del cambio profundo de Gobierno provocado por el jefe del Ejecutivo. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló que 'el Gobierno está en crisis desde hace mucho tiempo y la solución no es el cambio de ministros si no lleva aparejado un cambio de políticas y actitudes'.
Seis años de Gobierno, 30 ministros y sólo cuatro -Rodrigo Rato, Mariano Rajoy, Francisco Álvarez-Cascos y Josep Piqué- se mantienen desde el principio. Y de ellos, sólo uno, Rodrigo Rato, mantiene desde hace seis años el mismo puesto, vicepresidente segundo y ministro de Economía.
José Luis Olivas, hasta ahora vicepresidente primero del Consell que hasta ayer dirigía Eduardo Zaplana, será el nuevo presidente de la Generalitat valenciana. Pero todo indica que Olivas será un presidente interino hasta las próximas elecciones autonómicas en las que Francisco Camps será el candidato.
El cambio de rumbo electoral para Madrid que José María Aznar inició el domingo, cuando pidió a Alberto Ruiz-Gallardón que variase sus planes y compitiese por la alcaldía de Madrid, concluyó ayer con la confirmación de la candidata a la Comunidad.
El presidente del Gobierno, José María Aznar, llamó el pasado fin de semana por teléfono al presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y le citó el domingo en La Moncloa. Mantuvieron una conversación franca, sincera y abierta.
Ruiz-Gallardón vuelve a su cuna política con el reto de lograr los Juegos Olímpicos
La comisión permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) propuso ayer, por unanimidad, al pleno del órgano de gobierno de los jueces la concesión del amparo solicitado por el juez central de instrucción de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón frente a los ataques recibidos del Gobierno vasco.
El Gobierno catalán y Convergència i Unió se afanan en demostrar día a día un distanciamiento a marchas forzadas del Partido Popular.
La unidad contra el decretazo entre los sindicatos y los dos grandes partidos de oposición -el PSOE, en la práctica, e IU de manera explícita- quedó patente ayer en las reuniones que mantuvieron sus máximos dirigentes.
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