Ediles de Batasuna se enfrentan al teniente de alcalde de Vitoria
'Prepárate, que se te va a acabar pronto el chollo', le dijo una concejal
Los tres concejales de Batasuna en el Ayuntamiento de Vitoria provocaron ayer un altercado al enfrentarse con el primer teniente de alcalde, Miguel Ángel Echevarría (PP), cuando éste les instó a retirarse del vestíbulo, donde pretendían ofrecer una rueda de prensa. Según Echevarría, la concejal de Batasuna Eba González de Heredia le dijo 'espérate, que a ti se te va a acabar pronto el chollo', lo que éste interpreta como una amenaza.
Echevarría, que ejercía como alcalde en funciones por ausencia del primer edil, Alfonso Alonso, instó a los concejales abertzales a celebrar la reunión informativa en la sala de prensa del Ayuntamiento o en sus propias oficinas municipales, a lo que éstos se negaban.
El primer teniente de alcalde de Vitoria ha aparecido con reiteración en listas de objetivos de comandos y colaboradores de ETA y su seguridad fue reforzada hace unos meses, tras comprobarse que había sido objeto de seguimientos y hallarse información elaborada sobre sus movimientos. Echevarría explicó a este periódico que considera como una amenaza la frase que le dijo la concejal radical: 'Espérate, que a ti se te va a acabar pronto el chollo'.
'Cualquier cosa que venga de ellos puede ser tomada como un amenaza de las que llevamos tanto tiempo aguantando', dijo. El primer teniente de alcalde citó las numerosas ocasiones en que los radicales les indican que 'toman nota' de sus actuaciones. Echevarria añadió que el portavoz municipal de Batasuna, Enrique Bert, le mostró después en privado su desacuerdo con las palabras de su compañera.
Los concejales de Batasuna mostraban una fotografía de Unai Romano, cuya denuncia por torturas durante su detención tramita el Juzgado de Instrucción número 25 de Madrid. La fotografía de Romano, actualmente en libertad provisional, fue mostrada por el Grupo contra la Tortura el jueves en San Sebastián. En ella aparece con el rostro hinchado y amoratado, totalmente irreconocible tras su paso por dependencias policiales.
