Batería de preguntas a Pujol por el vínculo de sus hijos con el 'caso Lear'

La oposición de izquierdas en Cataluña está decidida a conocer hasta el más mínimo detalle la participación de los hijos del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, en el proceso de cierre de la planta que la multinacional norteamericana Lear tiene en Cervera (Lleida). Para ello, ha presentado una batería de 24 preguntas parlamentarias y ha reclamado una comisión de investigación. Pujol calificó ayer de 'demagogia para desprestigiar al Gobierno' la actitud de los partidos de izquierda (socialistas, Esquerra e Iniciativa).

Varios meses antes del estallido de la crisis, Lear contrató los servicios de la consultoría Europraxis, fundada entre otros por Josep Pujol Ferrusola -hijo del presidente catalán-, para diseñar la estrategia de cierre de la factoría, y requirió los servicios de una empresa de comunicación, Partners Comunication Consulting, para las relaciones con la prensa. Partners subcontrató a Tinkle, que a la vez asesora al conseller en cap, Artur Mas. Otro hijo de Pujol, Oriol, es secretario general de Industria, departamento que estuvo puntualmente informado de la crisis de Lear desde meses antes de estallar.

Los tres partidos de izquierda -Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa Verds (ICV)- han presentado 24 preguntas en el Parlament para dilucidar el grado de 'connivencia' entre el Gobierno de Pujol y la multinacional, así como la participación de Europraxis y Tinkle en este proceso laboral. Los socialistas quieren saber si directivos de la consultoría de Josep Pujol Ferrusola se han reunido con responsables de Industria. Las tres formaciones reclamarán una comisión de investigación y ERC, la reprobación del consejero de Industria, Antoni Subirà, primo político de Pujol.

Explicaciones

El éxito de estas propuestas depende del voto del PP -principal aliado parlamentario de Convergència i Unió- y ayer su portavoz, Alicia Sánchez, ya adelantó que primero esperará a conocer las explicaciones del Ejecutivo.

Jordi Pujol rompió ayer su silencio sobre este polémico asunto, que afecta a su familia, y denunció la 'demagogia' de la oposición para 'desprestigiar' al Gobierno catalán. 'No ha habido ninguna connivencia entre la Generalitat y la empresa', subrayó. 'Lo que se ha hecho es lo correcto, y no hay más que decir', remató.

ERC e IC también interrogarán al Gobierno sobre el contrato que Economía adjudicó a Indra por 2.200 millones de pesetas para renovar la informática de la Dirección General de Tributos. Indra compró en 2001 la empresa Europraxis por 7.400 millones (ver EL PAIS de ayer). El portavoz de ERC, Josep Huguet, declaró: 'Da la sensación de que nos encontramos delante de uno de los casos de empresas amigas del Gobierno de la Generalitat'.