_
_
_
_
_
LA QUIEBRA DE UNA EMPRESA

El hijo de Mas Canosa, acusado en Miami de llevarse el dinero de Sintel

Una demanda sostiene que el empresario cubanoamericano se llevó 1.200 millones

Una demanda en el Tribunal Federal de Miami acusa a MasTec, la sociedad del empresario cubanoestadounidense Jorge Mas Santos, hijo de Jorge Mas Canosa, de orquestar un fraude para desfalcar al menos seis millones de dólares (unos 1.200 millones de pesetas) de Sintel, la firma de telecomunicaciones que Telefónica vendió en 1996 y cuya crisis llevó a sus trabajadores a una acampada de protesta que se prolongó seis meses en pleno centro de Madrid. EL PAÍS ha obtenido una copia del sumario, así como de las transferencias bancarias y otros documentos internos firmados por los directivos de Sintel en los que los querellantes fundamentan sus alegaciones.

Los documentos detallan las operaciones que supuestamente se utilizaron para transferir estos 1.200 millones de pesetas a las arcas de MasTec a través de una complicada trama de sociedades participadas, subsidiarias o pantalla. Sintel fue vendida en 1996 por Telefónica al empresario anticastrista Mas Canosa por 4.600 millones de pesetas. Los sindicatos siempre calificaron esta operación de 'fraudulenta y opaca', y de hecho, presentaron ante la Fiscalía Anticorrupción una demanda contra los antiguos gestores, a los que acusaron de 'vaciar' la empresa. En junio del año pasado, Sintel presentó suspensión de pagos, entró en barrena, con sus 1.808 trabajadores sin cobrar las nóminas y acampados en el centro de Madrid, y en mayo de este año quebró.

Más información
El empresario rehúsa disputas políticas
El coste para el Estado de la crisis de Sintel asciende a 30.000 millones
Desbandada inminente en el campamento de Sintel
Trabajo aprueba la última regulación de empleo en Sintel
La asamblea de Sintel decide aceptar el plan del Gobierno y levantar el campamento
Rectificación: La demanda en Miami contra la empresa Mas Tec es de carácter civil
Foro:: La opinión de los lectores

La presunta trama de malversación detallada en la demanda de Miami funcionó principalmente entre enero y mayo de 1999, aunque se extendió hasta marzo de 2000, tres meses antes de que Sintel presentase suspensión de pagos.

Malversación

La denuncia en Miami ha sido presentada por Artcom Technologies, que alega que la sociedad de Jorge Mas urdió la destrucción de Sintel malversando millones de dólares con el único propósito de enriquecerse ilícitamente. Artcom es el nombre de la antigua MasTec Internacional, filial de MasTec, que cambió de denominación el año pasado, tras un cambio del equipo gestor. Jorge Mas vendió MasTec Internacional en 1998 a un grupo de directivos, que luego perdieron el control de la empresa. MasTec Internacional era la empresa a la que Telefónica vendió Sintel en 1996.

Las responsabilidades, según la demanda, recaen sobre los ex directivos de Sintel Ricardo Campos Dufau y Juan Antonio Casanova San Simón, que actuaron presuntamente como artífices del 'saqueo' a las órdenes de Jorge Mas Santos, presidente de MasTec. La red de transacciones descritas en el voluminoso sumario se extiende a través de bancos y sociedades de Luxemburgo, Haití, las Islas Vírgenes Británicas, México, Puerto Rico, Suiza y las ciudades de Miami y Nueva York en Estados Unidos.

El abogado de Campos, Brian Dunning, dijo el viernes que su cliente no quiere hacer declaraciones. Mas Santos niega la veracidad de las acusaciones, afirmando que 'no le consta' haber recibido los 1.200 millones de pesetas y que Casanova y Campos, 'si cometieron fraude, lo hicieron actuando por su cuenta'. Lo ha dicho tanto bajo juramento ante el tribunal federal como durante una entrevista con este periódico. 'Es ridículo. Lo que alega Artcom ocurrió después de que yo vendiera la empresa en 1998. Cómo van a ser Campos y Casanova mis hombres de paja si yo los he demandado'.

La versión de Artcom es muy distinta y queda resumida en un párrafo de la querella admitida a trámite por la juez federal Joan A. Lenard: 'MasTec supo todo el tiempo que los fondos cuyas transferencias tuvieron como destino final sus cuentas bancarias de Miami pertenecían a Sintel SA y a Artcom, siendo está última la compañía matriz del Holding Artcom Telecommunications Group que incluye AGS, Sintel SA, Sintel México y Sintel Internacional. MasTec despojó permanentemente a Sintel SA y a Artcom de estos fondos para provocar pérdidas con el único e injustificado fin de enriquecerse fraudulentamente'.

El trasvase del dinero se produjo, supuestamente, en cinco transacciones, durante un periodo en el que Mas Santos era simultáneamente presidente del consejo de administración de Sintel y presidente de MasTec. En cuatro de las cinco transacciones, el dinero salió de unos fondos adeudados a Sintel por Artcom Global Services (AGS), una subsidiaria de Artcom con sede en Puerto Rico. La quinta transferencia por valor de 150 millones de pesetas salió directamente del capital de Sintel.

El 29 de enero de 1999, Casanova autorizó la transferencia de los 150 millones de Sintel a Sintel Internacional. El pago se contabilizó como un 'préstamo' y se depositó en la cuenta 0176-0216-40-0204541091 de la entidad belga Generale Bank en la sucursal de Ortega y Gasset de Madrid. El mismo día, Sintel Internacional pagó ese importe en concepto de 'servicios profesionales' a Woolcombe Limited, una corporación constituida en las Islas Vígenes Británicas sin ningún tipo de actividad conocida.

Transferencias

El dinero se transfirió a la cuenta número 186562 de Woolcombe en el Lloyds Bank de Ginebra y, nueve días después, Campos y Casanova trasladaron ese dinero a otra cuenta en Luxemburgo. La trama, siempre según el sumario, culminó el 9 de febrero con la transferencia de dicha cantidad a MasTec en Miami.

Campos y Casanova eran ejecutivos de MasTec Internacional, la sociedad dueña de Sintel tras venderla Telefónica. En 1998, al frente del equipo gestor de la sociedad, compraron un 67% de MasTec Internacional a Mas Canosa. Las irreconciliables diferencias entre los distintos grupos de accionistas sobre la gestión de Casanova y Campos en Sintel, que ya estaba a punto de presentar la suspensión de pagos, llevó a la convocatoria de una junta general de accionistas el 21 de junio del 2000 en la que otro grupo de accionistas asumió el control de la sociedad.

Todo el presunto desvío fraudulento del capital de Sintel hacia MasTec sucedió antes de que el nuevo grupo de accionistas, que es el que entabla la demanda en Miami, asumiera el control de MasTec Internacional el 21 de junio del 2000. En diciembre de ese año, la empresa pasó a llamarse Artcom.

El nuevo grupo ordenó una auditoría a la empresa KPMG en la que, según su abogado, hallaron numerosas irregularidades que dieron pie a una investigación internacional ante la sospecha de que las transacciones eran fraudulentas. En esa investigación se fundamentan a su vez las acusaciones de fraude, conspiración para malversar fondos, latrocinio, apropiación indebida y enriquecimiento ilícito de la querella interpuesta en el Tribunal Federal de Miami.

Mes y medio después de cerrar la primera operación de trasvase de dinero, el 24 de marzo de 1999, Casanova y Campos, dieron órdenes a Artcom Global Services (AGS) para que transfiriera 5 millones de dólares (unos 1.000 millones de pesetas) a Sintel México. Al día siguiente le pidieron por escrito al director de Sintel México, Francisco Xavier Breña Malagamba, que transfiriera 4,2 millones de dólares de ese dinero a MasTec (cuenta 2153200128734 de First Union National Bank de Miami).

Simultáneamente y con el fin de encubrir la identidad de MasTec como destinatario, de acuerdo a la querella, los directivos de Sintel también enviaron un fax a Breña Malagamba pidiéndole que ingresara los 4,2 millones de dólares a nombre del abogado Michael Hill en la cuenta 011275706305 del banco Terrabank de Miami. Sólo esta segunda transferencia se llegó a efectuar, según los asientos bancarios.

Michael Hill, que es el abogado de Campos en Miami, confirmó en una carta a Breña Malagamba que el destinatario era MasTec. La comunicación fechada el propio 25 de marzo decía: 'El señor Campos ha pedido que usted gestione el envío de 4,2 millones a mi cuenta. En el momento en que reciba la transferencia inmediatamente transferiré dicho dinero a MasTec Inc. en Miami'. Hill no ha respondido la solicitud de entrevista de este diario.

Los 800.000 dólares restantes de los 5 millones de dólares originales se repartieron de la siguiente forma: 400.000 a SuperCanal de Argentina, 100.000 a una cuenta de Sintel Internacional en Nueva York, 50.000 a Michael Hill, 100.000 a Jorge Omar Devito en Buenos Aires y 150.000 se quedaron en Sintel México. La denuncia sostiene que son pagos a entidades o personas con las que ni Sintel SA ni Artcom tenían relación de negocios.

Indemnización

La querella entablada por Artcom contra MasTec en la Corte Federal de Miami solicita una indemnización de, al menos, tres veces la suma defraudada, es decir 18 millones de dólares, señaló el abogado que representa a Artcom, Pedro Martínez-Fraga, director de litigios internacionales del bufete Greenberg Traurig de Miami. Jorge Mas Santos y el abogado de MasTec, José Sariego, aducen que la demanda de Artcom es simplemente una respuesta a otra querella que ellos entablaron en Miami contra Sintel Internacional (empresa también registrada en las Islas Vírgenes Británicas) reclamando el pago de un préstamo de 4,1 millones de dólares. La fecha en la que se realizó el supuesto préstamo es desconocida y la cantidad no consta en ningún apunte contable de Sintel SA, según varias auditorías de la empresa obtenidas por este periódico.

En la demanda contra Sintel Internacional, Mastec no presenta contratos, pruebas bancarias o de otra índole sobre la existencia del préstamo. Mas Santos y Sariego sí afirman haber recibido de Casanova y Campos el 'pago íntegro' de 3.869 millones de pesetas de la venta de Sintel en 1998, aunque rehúsan decir en qué forma lo recibieron. 'Los pagos fueron en diferentes formas, como cheques o transferencias cablegráficas. MasTec no tenía conocimientos de la fuente de procedencia de estos foondos, pero ninguno se recibió a través de Artcom, Sintel SA, Sintel Internacional o ninguna otra subsidiaria de Artcom' dijo Mas Santos en una declaración jurada ante el Tribunal Federal de Miami.

Fuentes allegadas al caso federal señalan la sospecha de que los seis millones supuestamente desfalcados fueran parte del pago de la compra de Sintel. Mas Santos y Sariego se niegan a hacer comentarios al respecto. MasTec ha respondido a las alegaciones solicitando a la jueza Lenard que desestime la demanda. 'Desafiamos a Artcom a que presente pruebas admisibles de que si Campos y Casanova cometieron desfalco lo hicieron como agentes o representantes de MasTec'.

Jorge Mas Santos.
Jorge Mas Santos.EL PAÍS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_