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La tasa de accidentes laborales mortales en 2000 es diez puntos superior a la media española

El director general de Trabajo, Román Ceballos, defendió ayer que la muerte de 26 de los 111 trabajadores fallecidos el año pasado en la Comunidad se debió a 'patologías no traumáticas' (infartos o derrames cerebrales), un 116,7% más que en 1999. Asismismo, 35 trabajadores fallecieron por accidente de tráfico, un 75% más que el año anterior. Ceballos definió los 50 accidentes mortales restantes como de 'mayor interés preventivo', y recordó que se han reducido en un 24% respecto a 1999.

La tasa de mortalidad en el empleo, en cualquier caso, creció globalmente un 13,3%, lo que supone que cada semana del año 2000 murieron más de dos trabajadores valencianos. Valencia contabilizó 57 trabajadores muertos, 31 Alicante y 23 Castellón.

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Las cifras de siniestralidad general ofrecen más razones para el optimismo que las de mortalidad. En concreto, el año pasado se registraron 118.264 accidentes laborales con baja en el trabajo, de los cuales 117.689 fueron leves (99%), 1.021 graves (0,87%) y 111 mortales (0,09%). La tasa de siniestralidad, en conjunto, creció un 4,6% sobre 1999. Esta tasa es más de tres puntos inferior a la registrada en el resto de España (7,8%) y sitúa a la Comunidad en decimotercer lugar entre las distintas comunidades autónomas.

En 1999, esta tasa creció un 17,4% sobre 1998. La reducción del crecimiento, explicó Román Ceballos, confirma que la Comunidad ha conseguido romper la tendencia alcista en materia de accidentes laborales. Ceballos, además, subrayó que durante el segundo semestre del año pasado se demostró que se puede conjugar la creación de empleo con la ralentización del crecimiento en la siniestralidad.

Por provincias, la siniestralidad creció un 11, 6% en Alicante, un 2,9% en la de Castellón y un 1,9% en Valencia.

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Por sectores económicos, la siniestralidad laboral creció un 9,6% en la construcción y un 8,2% en el sector servicios, y descendió un 8,7% en agricultura y un 0,4% en la industria.

UGT defendió que los datos de siniestralidad 'rozan el límite de lo socialmente soportable'. El sindicato criticó que la política del Consell en este apartado ha servido únicamente para mitigar el incremento de accidentes leves y graves, pero no los mortales. UGT insistió en la relación entre siniestralidad y la alta tasa de temporalidad en el empleo y pidió medidas al Consell.

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